Las críticas contra Venezuela y Cuba hechas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, muestran que ambos países están por el camino correcto, aseguró el jueves el canciller venezolano Jorge Arreaza, de visita en Cuba.

“Trump decía que habían tomado sanciones e iban a luchar contra las dictaduras comunista y socialista de Cuba y Venezuela. Cuando el jefe del imperialismo nombra a Cuba y Venezuela como sus adversarios, quiere decir que estamos en el camino correcto”, dijo Arreaza en La Habana.

“Si Trump nos aplaudiera, estaríamos en el camino de la perdición. Qué bueno, presidente Trump, que entienda usted que nuestros pueblos son libres, que nuestros pueblos están transitando por los caminos del socialismo”, agregó el canciller visitante, que participó de un acto universitario de solidaridad de Cuba con Venezuela.

Arreaza fue recibido por el presidente de Cuba, Raúl Castro, quien le reiteró “la invariable solidaridad de Cuba con la Revolución Bolivariana y el presidente Nicolás Maduro, así como la confianza en la capacidad del hermano pueblo de Venezuela y su unión cívico-militar para afrontar los actuales desafíos”.

En su discurso sobre el Estado de la Unión ante el Congreso el miércoles, Trump presumió de las “duras sanciones” que su gobierno “ha impuesto a las dictaduras comunistas y socialistas de Cuba y Venezuela”.

Este jueves, el Secretario de Estado, Rex Tillerson, calificó al gobierno venezolano de Nicolás Maduro -una de las principales preocupaciones de Washington en Latinoamérica- de “régimen corrupto y hostil” que “se aferra a un sueño irreal, una visión de la región que ya ha decepcionado a su pueblo”.

Bajo la presidencia de Maduro, el país con las mayores reservas de petróleo del mundo enfrenta el desplome de su economía, en medio de escasez de medicinas y alimentos, inestabilidad política y un éxodo constante de ciudadanos.

Tillerson recordó las sanciones a Caracas impuestas por Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea, y llamó a Sudamérica a sumarse en su rechazo a Maduro. “Seguiremos presionando”, dijo.

En su primer año de gobierno, además de bregar contra Maduro, Trump enfrió el acercamiento a Cuba iniciado por su antecesor Barack Obama.

“El futuro de nuestra relación depende de Cuba. Estados Unidos seguirá apoyando al pueblo cubano en su lucha por la libertad (…) Venezuela y Cuba nos recuerdan que, para que nuestra región crezca y prospere, deben priorizar y promover valores democráticos”, agregó Tillerson.