Una mente preclara y un alma santa, pisoteadas por la impureza y purificada por Cristo; martirizado por la defensa de la Fe
Ricardo nació hacia 1490, pertenecía a la familia Reynolds de Pinhoe, en el condado de Devon (Inglaterra); de niño, fue un alumno destacado del Colegio de Cristo (Cambridge) y del Colegio Corpus Christi. En 1513, se diplomó en Teología y fue nombrado predicador de la Universidad.

En el mismo año que se graduó, hace los votos como monje en la Abadía de Syon de la Orden del Santísimo Salvador; destacado por ser un convento famoso por su santidad y por el clima intelectual que reinaba. Ricardo, no sólo era un hombre de vida santa, sino que era el único monje inglés que conocía bien las tres lenguas fundamentales: latín, griego y hebreo.
Su fama de erudito en Sagradas Escrituras, junto a su ortodoxia y santidad de vida, le valieron la consideración de ser uno de los mejores teólogos de su tiempo en Inglaterra; esto lo llevo, en 1535, a ser encarcelado en la Torre de Londres por rechazar prestar el juramento de supremacía.

El 28 de abril, durante el proceso, manifestó su oposición a una injusta ley contraria a su fe: “Porque quiero estar a bien con mi conciencia y la de aquellos que están aquí conmigo, yo declaro que nuestra fe tiene mayor peso y está sostenida por mayores testimonios que la de ustedes, porque los pocos testimonios que han conseguido del Parlamento de un solo reino, yo tengo de mi parte a todo el mundo cristiano”. A raíz de esa postura, lo describen como “un hombre de semblante angélico, amado por todos, y lleno del Espíritu Santo”.
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Por defender el Primado de Pedro, y oponerse a la ley de Supremacía de Enrique VIII fue brutalmente martirizado en Tyburn (Londres) junto a tres monjes cartujos y al sacerdote Alejandro Hales, el 4 de mayo de 1535; los miembros del cuerpo de Reynolds, el primer hombre en rechazar el juramento, fueron cortados en pedazos y colgados en diferentes partes de Londres.
Fue Beatificado en 1929, y Canonizado el 25 de octubre de 1970, por el Papa Pablo VI, junto a los otros 40 mártires de Inglaterra y Gales, cuya memoria se fijó el 4 de mayo.

Agelvis Villalonga L.