Las cabras son capaces de distinguir emociones en el tono de la voz humana

Aunque ya se había investigado que los mamíferos rumiantes domésticos pueden identificar las emociones en las expresiones faciales humanas, es la primera vez que se demuestra que también son capaces de entender el tono de voz

31/01/2024 Cabras. Las cabras muestran evidencias de haber desarrollado la sensibilidad para diferenciar las variaciones de la voz humana, así como distinguir el entre el tono alegre o enfadado. POLITICA INVESTIGACIÓN Y TECNOLOGÍA LIBRESHOT.COM

Las cabras muestran evidencias de haber desarrollado la sensibilidad para diferenciar las variaciones de la voz humana. De la misma forma, distinguen el entre el tono alegre o enfadado.

Esta es la conclusión de un estudio coliderado por el experto en comportamientos y bienestar animal en la Universidad de la Ciudad de Hong Kong (CityUHK), el profesor Alan McElligott.

La investigación, publicada en la revista Animal Behaviour, revela que las cabras podrían haber desarrollado esta capacidad por su larga relación con los humanos. Esto «contribuye a la escasa biografía existente que indica que el ganado, al igual que los animales de compañía, es sensible a las señales emocionales humanas«, según explicó.

Aunque ya se había investigado que las cabras pueden identificar las emociones en las expresiones faciales humanas, es la primera vez que se demuestra que también son capaces de entender el tono de voz.

Cabras sensibles

Los investigadores hicieron que las cabras escucharan una serie de voces que expresaban tanto valencia positiva (feliz) como negativa (enfadada). Los resultados obtenidos demostraban que el 75 % de las cabras «miraron al hablante tras un cambio de valencia durante periodos más prolongados. El comportamiento sugiere que estas cabras habían percibido el cambio en el contenido emocional de las grabaciones de voz humana».

Pero también hubo animales que no respondieron igual a los estímulos ni sufrieron cambios fisiológicos como aumento de latido. Los investigadores, posteriormente, lo atribuyeron a factores externos.

Aun así, tanto McElligott como la doctora de la Universidad de Roehampton (Reino Unido), Marianne Mason, aseguran que estos resultados son «esenciales» para entender el «comportamiento» de los animales.

«Hay que seguir investigando. Debemos comprender la importancia de la voz humana en la vida emocional de las cabras. Así mismo, debemos pensar en el bienestar otras especies domesticadas», concluye el profesor McElligott.

Con información de El Universal