Luis Jiménez arrancó su exitosa carrera en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional en el estado Lara y con la camiseta de Cardenales. Ahí, estuvo por 13 temporadas y siempre soñó con levantar un título. Tuvo oportunidades, pero nunca lo logró y fue en la campaña 2010-2011, cuando los Caribes de Anzoátegui lo tomaron como refuerzo y finalmente obtuvo su corona.

Ahora, el destino nuevamente cruzó a esas franquicias y en el mismo lugar donde inició su carrera, aunque defendiendo distintos colores.

“Obviamente yo soy larense, pero esto es un negocio”, inició el toletero. “Mi trabajo es ayudar al triunfo de Caribes y yo me aferro a eso”.

El “Rey de Bobare”, como fue apodado por su identificación con la tierra que lo trajo al mundo, es un experto en laborar en finales de LVBP. Solo cinco toleteros tienen más cuadrangulares que él (6) y sus 24 carreras remolcadas lo colocan como el segundo toletero zurdo más productivo en instancias definitorias detrás de Alex Romero (30), quien disputó 23 juegos más que Jiménez.

“Estoy tranquilo porque no me siento a estar viendo números ni estar pendiente de esas cosas”, señaló el corpulento paleador. “Lo único que quiero es ganar, hacer el trabajo y ejecutar las pequeñas cosas. Escuché que hay varias marcas, aunque solo quiero hacer ajustes para traer otro título a Anzoátegui”.

Precisamente fue él una pieza determinante para que el oriente celebrara uno de sus títulos. Jiménez cargó con el Jugador Más Valioso de la campaña 2010-2011 cuando ligó para .286 con tres batazos de vuelta entera y 12 rayitas empujadas, en la serie que se llevaron los aborígenes en siete compromisos contra los Tigres de Aragua.

“Caribes no tiene héroes”, respondió Jiménez al ser consultado si sentía más responsabilidad en la alineación por su experiencia. “Todos somos iguales. Creo que todos hemos hecho los ajustes necesarios para llegar a donde estamos”.

DISFRUTAR ES LA CLAVE

Mientras varios jugadores lidian con problemas para controlar los nervios en juegos de presión, Luis Jiménez no tiene inconveniente alguno. No es precisamente por su talento, porque otras figuras también lo tienen, sino por el cariño especial que siente por el juego.

“Nunca he sentido presión. Jamás en mi vida”, continuó. “Confucio dijo: ‘trabaja en lo que te gusta y nunca tendrás que trabajar’. Creo que eso define a la perfección porque nunca me afectó la presión en mi carrera”.

 

SIN PROBLEMAS CON LOS GUAROS

Durante los primeros encuentros de la presente final de la LVBP, uno de los detalles más curiosos fue los pitos e insultos que recibió Luis Jiménez por parte de la afición de Cardenales. Sin embargo, y aunque los improperios subieron de tono, el toletero negó tener problemas con su antigua fanaticada.

“Yo conozco a todas las personas que estaban ahí. Recuerden que jugué mucho tiempo ahí, nací, me crie y todavía vivo en Bobare, así que no habrá ningún tipo de problemas al jugar ahí nuevamente”, concluyó.