El joven circuito inicia con choque de trenes

La espera terminó para la Liga Americana, que finalmente tendrá el inicio de las Series Divisionales, con dos encuentros de gran calibre, teniendo en lado y lado a dos equipos que son amplios favoritos para llevarse el trofeo de la Serie Mundial de la gran carpa.

El primer enfrentamiento del día lo protagonizarán los Astros de Houston y los Rays de Tampa Bay, quienes vienen de llevarse el juego por el comodín contra los Atléticos de Oakland.

Los siderales, campeones en 2017, tendrán a su mejor lanzador, y quizás el mejor este año en todas Grandes Ligas, en la loma, pues usarán a Justin Verlander para abrir su rotación de lujo. El diestro dejó marca de 21-6 y 2.58 de efectividad en la ronda regular, viviendo una de sus mejores campañas, en donde, por primera vez en su carrera, llegó a los 300 ponches en una zafra, mientras que también superó los 3000 ponches en su trayectoria.

Por su parte, Tyler Glasnow (6-1 y 1.78) buscará frenar a la tan poderosa ofensiva de los Astros, quienes además cuentan con la ventaja de localía, teniendo nuevamente a José Altuve como figura en la caja de bateo, acompañado por George Springer, Michael Brantley, Carlos Correa y Yuli Gurriel.

En la otra acera se medirán los Yanquis de Nueva York contra los Mellizos de Minnesota, con Gleyber Torres como uno de los principales referentes y bastiones de los Bombarderos del Bronx.

El duelo monticular entre ambas novenas tendrá la particularidad que tanto James Paxton (Yanquis), como José Berríos (Mellizos) abrirán por primera vez en playoffs.

Paxton sabe lo que es dominar a la tropa gemela, pues contra ellos en su carrera presenta efectividad de 2.25, mientras que Berríos tiene registro de 5.79 en tres encuentros contra los locales.

Altuve va con todo

José Altuve será uno de los peloteros de los que se tendrán que cuidar los Rays, pues en siete juegos contra ellos este año, el camarero venezolano disparó dos cuadrangulares y tres dobles, mientras que en su carrera contra Tampa Bay registra promedio de bateo de .294 en 46 juegos, en los que ha disparado 53 hits, sin contar playoffs. El MVP del 2017 llega a su cuarta Serie Divisional de postemporada, instancia en la que batea .294 con cuatro jonrones.

Diario Lider