Que un bateador conecte Grand Slam es bastante complicado, así como lo es que un pitcher conecte de cuadrangular. La suma de estos dos da un resultado histórico en la historia del beisbol de Grandes Ligas y, por supuesto, en la pelota venezolana.
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Johan Santana venía de un inning duro. Tenía dos outs en la pizarra y con la ventaja de la localía de la Liga Nacional en aquel tiempo, tocaba el turno de lanzador de los Marineros de Seattle, Félix Hernández. El escenario pintaba perfecto para que el zurdo de Tovar saliera del inning complicado, pero “El Rey” tendría otros planes.
Un lanzamiento afuera, un swing grande y una conexión sólida por el jardín derecho terminó con el único Grand Slam y el único jonrón en la carrera de Félix Hernández. Cuatro carreras a la cuenta de Johan Santana que, a pesar de este evento, tuvo una temporada de 2.53 de efectividad.
Los probablemente más grandes lanzadores que ha tenido el beisbol criollo hasta la actualidad se combinaron para ser protagonistas (y dependiendo del lado en que se vea, el antagonista) de un momento recordadísimo en la historia de los Marineros de Seattle y uno para el olvido en el de los Mets de Nueva York.
Meridiano
