Un hombre identificado como Jofre Jefferson Berrío Ruiz, falleció tras estar 15 días hospitalizado en la Unidad de Caumatología del Hospital Jesús Yerena, en Lídice, parroquia La Pastora, municipio Libertador de Caracas.

Berrío Ruiz ingresó al hospital por quemaduras de segundo grado en el 70% de su humanidad.

Sus quemaduras tuvieron lugar un 16 de enero cuando hacía cola junto a otras personas para comprar pan a las 3:00 am. En ese momento, el hombre fue atacado por un grupo de personas en las cercanías de una panadería, justo en la entrada de la avenida principal de Manicomio-Lídice.

Cabe relatar, que el joven tenía 23 años de edad e iba acompañado, el día del hecho, por dos de sus parientes.

LO QUE SUCEDIÓ

Berrío recibía un tratamiento para controlar su epilepsia, que era constante ante situaciones de estrés. Por ello, decidió apartarse de la larga fila para tomar su pastilla y descansar en un rincón de la calle.

Sin embargo, el joven recibió amenazas, entre gritos y molestias por parte de un grupo de personas, que le rodeó y sin razón alguna, le prendieron fuego.

Ruiz rápidamente se levantó del lugar y con desesperación iba de un sitio a otro, pidiendo auxilio. Los familiares apagaron las llamas con trapos, mientras que las demás personas pidieron ayuda de un carro para llevarlo al centro hospitalario más cercano.

En este orden, la víctima tuvo que luchar ante los posibles ataques y convulsiones que se le presentasen producto de su enfermedad, hasta que fue trasladado al recinto hospitalario.

Se conoció que el joven ya no podía más, pues su salud iba desmejorando. De hecho, sus familiares no pudieron costear el tratamiento necesario durante los días en el hospital.

“A los hospitales hay que llevar todo; si te enfermas en esta Venezuela de hoy difícilmente te recuperas porque hay carencia de todo”, aseguró un pariente del afectado.

En este mismo sentido, agregó que “los precios de la medicina varían de un lugar a otro, no recibimos donaciones”.

Su muerte tuvo lugar el martes a las 5:30 pm. Sus padres zanjaron que “no aguantó tanto sufrimiento”.

EL POR QUÉ DE LAS AMENAZAS

La familia Berrío Ruiz ya estaba acostumbrada a la rutina de hacer cola para el pan. De esta forma, los padres relataron que el lunes 15 de enero, cuando estaban en la fila, sujetos no identificados en una moto le gritaron: “Si siguen haciendo cola, los vamos a robar”, cerraron.

Un día después su hijo fue incinerado.