Su historia inicia hace cuatro años, cuando un hombre en estado de ebriedad y al volante la arrolló, trayendo como consecuencia la pérdida de su pierna izquierda a la altura de la rodilla. 

Con tan solo doce años Valentina Rodríguez cambiaría el baile por la natación en el año 2013, inicialmente para comenzar con su proceso de rehabilitación, luego de aquel accidente donde perdería uno de sus miembros inferiores. Sin embargo, no contaba con que años más tarde se convertiría en una de las promesas deportivas de la natación paralímplica en el país.

Comenta que su familia ha sido su principal motor para seguir adelante “desde el accidente, porque así lo describo, ellos siempre estuvieron allí apoyándome e inspirándome a ser una persona grande en la vida y es justo por lo que trabajo en este momento”, expresó.

Esta joven atleta quiere ser ejemplo para otras personas, que aun contando con perfecto estado de salud e integridad dicen no poder salir adelante por sus propios medios “trato de motivar al resto de las personas a quienes invito a superarse y seguir adelante, porque así es como debemos hacerlo”, aseguró.

Valentina se siente muy agradecida con la vida por estar rodeada de otros grupo de atletas que al igual que ella, han alcanzado grandes logros en el mundo de la natación muy a pesar de sus condiciones “siempre están allí apoyándote y dándote fuerzas y ánimos para creer en tu talento”, comentó.

Cree además que los pequeños sacrificios que debe hacer para cumplir, no solo con sus actividades deportivas, sino también con las académicas valen la pena y le han permitido seguir creciendo personal y profesionalmente “si quiero salir adelante con mi deporte y mis estudios tengo que hacer ciertos sacrificios, que se resumirán en victorias más adelante”, aseguró.

Su experiencia en Sao Paulo 2017 

Aunque comenzó a practicar la natación como parte de sus terapias de rehabilitación, sus padres y entrenador vieron en ella el potencial, que desarrollaron poco a poco hasta alcanzar las condiciones necesarias para que esta joven representara a Venezuela en los Parapanamericanos el año pasado en Sao Paulo, Brasil donde obtuvo la medalla de bronce y actualmente se prepara para la clasificatoria de los Juegos ParaSuramericanos Argentina 2018.

En cinco años, comenta, se ve portando un uniforme de Venezuela y recibiendo medalla en nombre de todo el país.

Su madre Nancy Martínez, quien no dejaba de verla con ojos de orgullo, comentaba que Valentina es una guerrera, y ha dado a todos en su familia una lección de vida porque nunca se ha limitado para alcanzar sus metas.

“Ella esta pendiente de sus estudios, de sus prácticas, es excelente en todo lo que hace” aseguró mientras no dejaba de verla.

Asimismo indicó que entre sus metas se encuentra la participación en Tokio 2020 y por cual sigue trabajando arduamente para conseguirlo, siempre con el apoyo de su familia y su entrenador.

Por su parte, su entrenador, quien también ha estado presente en cada logro de esta campeona, comenta que mientras “nosotros hacemos cosas ordinarias, los atletas paralímpicos hacen cosas extraordinarias” y que Valentina es muestra de ello, luego de alcanzar grandes logros en esta disciplina que hoy representa.

Un ejemplo de superación, constancia y muestra de que a pesar de las pruebas difíciles que puedan presentarse, creer en sí mismos y en sus talentos, marcará sin duda alguna, la diferencia entre lo que se es y lo que se puede llegar a ser en la vida.

NB