Kenia | Tras el desbordamiento de un río por las fuertes lluvias aunmente el numero de fallecidos

El desastre sucedió por el bloqueo de un túnel, aunque las autoridades informaron primero que los muros de la presa Dark Tunnel Valley, situada en las colinas de Kijabe, reventaron

El vicepresidente keniano, Rigathi Gachagua, confirmó este martes 30 de abril, que el número de muertos aumento de 45 hasta 71, debido al desbordamiento de un río que arrasó cientos de casas y vehículos, el pasado lunes 29 de abril, en el sur de Kenia.

“Tenemos 46 personas en la morgue, pero se están llevando más cuerpos allí, así que serán alrededor de unos 71. Hay muchas otras personas que siguen desaparecidas y la búsqueda continúa”, declaró Rigathi.

Las cifras de fallecidos fueron confirmadas también por la gobernadora del condado de Nakuru, Susan Kihika, en el que sucedió la tragedia.

En un principio, las autoridades informaron que el desastre se debió a que los muros de la presa Dark Tunnel Valley, ubicada en las colinas de Kijabe, no aguantaron la presión y se reventaron. Sin embargo, a última hora del lunes, el Ministerio de Agua, Irrigación y Saneamiento negó esta versión y afirmó que el desastre se debió al bloqueo de un túnel.

El conducto, que estaba destinado a canalizar las aguas del río Tongi a través de una vía de tren, quedó lleno de escombros, rocas, troncos y tierra desplazada, por las fuertes precipitaciones que afectaron al país, lo que provocó el desbordamiento del río y algunos de sus afluentes.

“Debido a la fuerza y la presión ejercidas, el agua arrasó la vía ferroviaria y empezó a moverse río abajo a una velocidad y una rapidez muy altas, lo que causó destrucción de propiedad y pérdida de vidas a las personas que vivían río abajo”, señaló el Ministerio en un comunicado.

La tragedia se cebó especialmente con la localidad de Kamuchiri, cerca de la ciudad de Mai Mahiu.

Más de 200 muertos en un mes, según detallaron las autoridades este lunes, más de 110 personas fueron rescatadas del barro y fueron trasladadas a hospitales locales por voluntarios de la Cruz Roja y los servicios de emergencia de Nakuru, aunque se teme que haya más atrapadas.

“Me desperté sumergido en el agua alrededor de las 3 de la madrugada (00:00 GMT). Las paredes de la casa se habían derrumbado. Mi familia y yo estábamos flotando en el agua”, declaró William Lokai de 43 años, siendo uno de los afectados a diario local.

El incidente provocó el corte de la carretera principal que une Nairobi con Mai Mahiu, repleta de rocas, barro y troncos.

El ministro del Interior de Keniano, Kithure Kindiki, informó este martes que el número total de personas fallecidas en el país a causa de las inundaciones durante el último mes se elevó a 169, sin tener en cuenta la cifra más reciente.

“Un total de 91 personas están desaparecidas actualmente. Mai Mahiu representa 53 de estas personas desaparecidas mientras el condado de Garissa este, ha reportado que desconoce el paradero de 16 personas”, señaló el Ministerio.

En este sentido, alrededor de 190.942 kenianos se han visto afectados por las inundaciones y cerca de 150.500 han tenido que abandonar sus hogares, mientras un centenar han resultado heridos.

Frente a esta crisis, el Ministerio de Educación de Kenia ha pospuesto una semana, hasta el 6 de mayo, el inicio del segundo trimestre en las escuelas públicas de educación primaria y secundaria.

En todo el país, las precipitaciones torrenciales han dañado numerosas infraestructuras, como puentes y carreteras.

Otros países de África oriental, como Tanzania, Burundi y la República Democrática del Congo (RDC), también han sufrido las consecuencias de las inundaciones, además de Kenia.

El pasado jueves, el primer ministro de Tanzania, Kassim Majaliwa, incrementó el número de fallecidos en el país durante el mes de abril de 66 a 155, debido a las intensas lluvias e inundaciones causadas por el fenómeno meteorológico de El Niño.

El cambio en la dinámica atmosférica causado por el aumento de la temperatura del océano Pacífico se conoce como El Niño.

Estas inundaciones se producen después de la peor sequía registrada en el Cuerno de África en las últimas cuatro décadas. La falta de agua dejó a Somalia al borde de la hambruna en 2023 y a 6,6 millones de personas en inseguridad alimentaria aguda, según la ONU.

Fuente: Globovisión