Una agencia federal de EEUU estudia la posibilidad de prohibir el uso de las estufas a gas, ya que se comprobó que en su uso emiten gases nocivos para la salud.
Un comisionado de la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de EEUU (CPSC, por sus siglas en inglés), Richard Trumka Jr, destacó en una entrevista a Bloomberg que «este es un peligro oculto. Cualquier opción está sobre la mesa. Los productos que no son seguros para los ciudadanos se pueden prohibir».
De acuerdo al reporte, la agencia tiene previsto «tomar medidas» para enfrentar a la contaminación interior que ocasionan las estufas.
Aproximadamente, el 40% de los hogares que usan estufas a gas, en EEUU, emiten monóxido de carbono y materia fina en niveles establecidos como inseguros, por la Agencia de Protección Ambiental (EPA) y la Organización Mundial de la Salud.
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Dichas cifras las arrojaron estudios que realizó la Sociedad Química Estadounidense y el Instituto de Integridad de Políticas de la Facultad de Derecho de la Universidad de Nueva York.
Asimismo, Trumka comunicó a Bloomberg que la agencia proyecta establecer espacios de discusión públicos sobre los peligros de las estufas de gas. Entre las opciones, además de la prohibición, está «establecer normas sobre las emisiones de los aparatos».
Un grupo de legisladores, mediante una carta al presidente de la CPSC, Alexander Hoehn-Saric, resaltó que el uso de estufas acelera las enfermedades cardiovasculares.
«La exposición a corto plazo al nitrógeno (NO2) está relacionada con el empeoramiento del asma en los niños. Además, se determinó que la exposición a largo plazo puede causar el desarrollo del asma».
Con información de: VN
