Cruz de Mayo: Celebración religiosa convertida en tradición durante época de cosechas

Se conmemora cada 3 de mayo.

La conmemoración de la Cruz de Mayo es una celebración religiosa cuya creación en Latinoamérica se remonta a la colonización española.

En aquella época, los misioneros católicos no conocían el dialecto de los nativos, fue así que pensaron en la cruz, símbolo de fácil construcción que ponían a la vista de todos en la comunidad.

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Los misioneros mantenían el culto a la cruz durante este mes de mayo, haciendo una procesión en la que se le brindaban flores y limosnas, a la vez que se invitaba a la gente para homenajearla.

En varios países de América Latina adornan las cruces con flores muy coloridas, se hacen procesiones, bailes o se venera el madero en lugares visibles para todos los habitantes de un pueblo.

Cruz de Mayo en Venezuela

El motivo principal de esta fiesta en Venezuela y en otros países del mundo, es rendir a la Naturaleza un homenaje por ser en mayo el inicio de la temporada de cosechas, y se vincula a la naturaleza por el hecho de que empieza la época de lluvias.

La evolución de la costumbre ha llevado a considerarla como una forma de pedir su protección durante el resto del año. Estas fiestas van acompañadas de manifestaciones musicales propias de cada región, como son los galerones, punto y llano, fulías, malagueñas, romances y tonos.

Los instrumentos utilizados son el cuatro, la mandolina, la guitarra, el tambor cuadrado, las maracas y el acordeón. Se reparten también bebidas y dulces típicos. La música, los rezos, la comida y demás elementos varían de acuerdo a la localidad.

En Lara también lo celebran

El Velorio de la Cruz de Mayo en Lara se celebra en varios municipios de la entidad larense. Una de las más llamativas son las que se hacen en El Tocuyo, pero además en Quíbor y distintas localidades de Jiménez se celebran, así como del Municipio Palavecino, especialmente en Los Rastrojos y Agua Viva.

El municipio Torres, en muchas de sus parroquias, es común observar esta tradición muy arraigada entre sus pobladores. Mientras que en Río Claro, municipio Iribarren, también hacen festividades propias.

Un cálculo reciente consultado entre cronistas de la región pudieron contabilizar más de 100 veloríos en todo el territorio larense.

Con información de TS, IMP, VT