Zamora perdió su último cotejo de la Libertadores ante la escuadra de Atlético Mineiro y quedó en el sótano del grupo B en la competición.
Un empate le bastaba a la furia llanera para quedar en la tercera casilla e ingresar a la Copa Suramericana pero no pudieron concretar el objetivo.
Los de Ali Cañas salieron por todas en el segundo tiempo estando ya abajo en el marcador (2-0), adelantó sus líneas y el Mineiro se replegó para contraatacar, pero el conjunto de Barinas no se asociaba y se encomendaba a las acciones individuales de sus atacantes.
Así llegó el descuento, cuando tras una jugada en solitario de Rojas el principal colombiano Carlos Herrera Bernal decretó un penalti que transformó en gol el central uruguayo del Zamora, Nacho González.
En adelante el Zamora buscó la igualdad con más ganas que ideas, y cuando restaba muy poco el entrenador Cañas cambió el dibujo para acumular más hombres en ataque.
Pero esta idea tampoco surtió efecto y estuvo más cerca el Mineiro que el Zamora de conseguir otra diana.
Cuando se jugaba el tiempo agregado, varias de las torres de iluminación fallaron, pero el duelo prosiguió tras una breve charla entre los árbitros, y pese a la escasa visibilidad en partes del terreno.
Con este triunfo en el estadio La Carolina” el elenco brasileño quedó tercero del grupo y ganó un valioso premio de consuelo que otorga la Copa Libertadores: una plaza en la presente Copa Suramericana.
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