Western Unión podría suspender “remesas”

Western Unión, la compañía norteamericana líder en envíos de remesas a Cuba, está valorando suspender las transferencias financieras hacia la isla excepto desde Estados Unidos, dijo la empresa el miércoles en la noche a el Nuevo Herald.

Western Unión podría suspender “remesas” como parte de las sanciones de EEUU a Cuba

Western Unión, la compañía norteamericana líder en envíos de remesas a Cuba, está valorando suspender las transferencias financieras hacia la isla excepto desde Estados Unidos, dijo la empresa el miércoles en la noche a el Nuevo Herald.

Analistas consideran que se puede tratar de un paso más en la escalada de sanciones de la administración del presidente Donald Trump contra el gobierno cubano por su apoyo al régimen de Nicolás Maduro en Venezuela.

“Debido a los desafíos únicos de operar servicios de remesas de países fuera de los Estados Unidos a Cuba, Western Unión puede perder su capacidad de operar servicios de transferencia de dinero a Cuba”, dijo una vocera de Western Unión a el Nuevo Herald.

 “Los clientes en los EEUU podrán continuar enviando dinero a través de la aplicación móvil de Western Unión, en la página web de la compañía o en tiendas minoristas”, agregó.

Western Unión aseguró a el Nuevo Herald que la empresa comprende “el impacto” que puede tener esta medida, por lo que se mantendrá en contacto con los clientes que podrían ser afectados.

Para el economista Emilio Morales, director de The Havana Consulting Group, se trata de “una señal de advertencia”.

“Las remesas a Cuba constituyen hoy la fuente fundamental de divisas del país. La reducción sistemática de los subsidios venezolanos y el fin de varias misiones médicas en el extranjero han reducido significativamente las entradas de divisas por lo que Cuba se encuentra en una crisis de liquidez”, explicó vía telefónica.

Morales considera que si Western Unión dejara de enviar remesas a Cuba en febrero desde otros mercados que no sean EEUU, esto no tendría un impacto significativo en la economía de la isla.

“El 90 por ciento de las remesas va a Cuba desde Estados Unidos. Solo un 10 por ciento sale de otros países. En esos lugares, no es solo Western Unión quien opera, por lo que comparte el mercado con otros competidores”, explicó.

“Bajo la administración del ex presidente Barack Obama, varias empresas norteamericanas obtuvieron licencias que les permitieron hacer negocios con Cuba. Pero eso ha cambiado desde que Trump está en la Casa Blanca”, dijo.

“Esta es una señal de que pueden venir medidas más severas con las remesas, las recargas telefónicas de Etecsa y otras entradas de divisas a Cuba”, agregó. Según The Havana Consulting Group, Cuba recibió en 2018 unos $6,600 millones en forma de remesas en efectivo y mercancías.

La administración de Trump ha limitado las remesas a $1,000 por trimestre y sólo a familiares en un intento para forzar el gobierno de Cuba a abandonar a su aliado y benefactor venezolano.

La escalada de sanciones contra el gobierno cubano también incluye la suspensión de los vuelos directos a los principales destinos en la isla excepto La Habana, la prohibición de los viajes en crucero y la activación de los Títulos III y IV de la Ley Helms-Burton, que permiten demandar a los inversionistas en propiedades confiscadas a norteamericanos por el gobierno y prohibir la entrada a Estados Unidos de los inversores y sus familiares.