Venezuela no teme a la albiceleste

Aunque la historia de enfrentamientos entre Venezuela y Argentina es ampliamente favorable para la Albiceleste, en los últimos años la Vinotinto ha encontrado caminos para contener el poderío de los bicampeones mundiales.

El abrumador dominio de Argentina, que desde 1951 hasta septiembre de 2011 había derrotado a la Vinotinto en cada uno de los 20 enfrentamientos que habían sostenido, cambió un mes después en el estadio de José Antonio Anzoátegui de Puerto La Cruz.

Aquel recordado 11 de octubre, en el partido de la eliminatoria al Mundial de Brasil, marcó un cambio. Con una defensa impasable, en la que Fernando Amorebieta se encargó de anular a Messi cada vez que el astro de Argentina incursionaba en el área venezolana, Venezuela descubrió la pócima para anular la magia de Messi y reducir a su equipo. El propio Amorebieta se encargó de anotar de cabeza el memorable tanto del inédito triunfo 1-0 sobre Argentina, y desde entonces Venezuela ha encarado cada partido con más fe en sus posibilidades.

Al punto que desde 2011, Venezuela acumula dos victorias, dos empates y dos derrotas. En el último enfrentamiento, en el duelo amistoso jugado en Madrid, en marzo pasado, la selección volvió a aplicar la misma estrategia.

Presionó a Argentina en todos los sectores de la cancha para impedir que manejara la pelota con amplitud, escaló la marca sobre Messi para cerrarle las líneas de pase y atacó con velocidad por los costados con el propósito de sorprender a la lenta defensa Albiceleste.

Las esperanzas de Venezuela de lastimar a Argentina estarán puestas de nuevo en la velocidad de Darwin Machís y Jhon Murillo y en la fuerza de Salomón Rondón para luchar con los centrales y abrir espacios en el área rival.