Un día en el paradisíaco hotel de Lionel Messi

Hace apenas un año el astro del futbol, Lionel Messi, adquirió por el precio de treinta millones de euros, el hotel MIM de Sitges, en Barcelona, una adquisición que devela la faceta de “hombre de negocios” de Messi, y deja al descubierto unos de los caprichos más lujosos de la estrella del barca.

Diseño magistral y ecológico

En la entrada del hotel 4 estrellas, a manos de la gestión del Majestic Hotel Group, se encuentra uno de los logros más grande en la carrera del futbolista, el quinto balón de oro, un recibimiento tan de lujo como el hotel.

El MIM de Sitges se localiza en Cataluña, a unos 40 minutos de Barcelona, tiene un estilo mediterráneo y esta a pocos metro del paseo marítimo, lo que le da al hotel una atmósfera cómoda e impresionante. Su arquitectura es sostenible y contribuye al medioambiente, debido a que en su construcción se utilizo el 80% de material reciclado y sensible a las energias limpias, reseñó El Periódico.

Entretenimiento para todo tipo de persona

Para las personas que aman la tranquilidad y el confort el lujoso hotel cuenta con maravillosas instalaciones dentro del MIM, magnífico spa, santuario de la relajación, amplio circuito de hidroterapia compuesto por sauna y hamán, duchas de sensaciones, tumbonas calefactads y piscinas con un sistema de hidrólisis salina, las que dejara al huésped en un estado de relajación y renovación plena.

A puertas afuera el entretenimiento es muy diverso; para los amantes del arte y la cultura se encuentran los museos de Cau Ferrat y Maricel, antiguas casas del escritor, pintor y coleccionista Santiago Rusiñol; y para las personas con la sangre un poco caliente tienen la oportunidad de disfrutar en los diferente bares, pubs, discos y locales gayfriendly esparcidos en la ciudad.

Gastronomía al estilo mediterráneo

Algo que complementa al pie de la letra al MIM es su gastronomía mediterránea con toques internacionales, la proximidad del producto alimenticio en la lonja de Volanova y de los huerto del Garraf, cerca del hotel, permiten disponer de una materia prima excelente a la que apenas le hacen falta intervenciones mínimas. Sabores ensalzados pero no camuflados que emergen de los fogones del chef Enrique López, regados por vinos de la D.O. Penedés y cervezas locales.

Para disfrutar de estos platillos, esta a pie de calle el restaurante Land; o el diamante en bruto del hotel: el Sky Bar, con una terraza de más de cuatrocientos metros cuadrados de superficie y una panorámica de trescientos sesenta grados sobre Sitges. Un lugar sin precedente en donde puedes elegir diferentes opciones para pasarla de maravilla, en un entorno mágico.

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