Juan Bautista Morales (37) murió luego de tomarse unos tragos de cocuy la noche del 31 de diciembre en el caserío María Lionza, en la vía hacia Guarico, municipio Morán. Estuvo recluido en el Hospital Central Antonio María Pineda de Barquisimeto, pero el sábado murió.

Se conoció que Juan estaba en una fiesta cerca de su casa y unos amigos le ofrecieron unos “tragos” de cocuy. El hombre pasó toda la noche en la fiesta, pero al día siguiente se sintió mal y comenzó a convulsionar. Los familiares asustados por lo que le estaba pasando lo llevaron hasta el CDI del pueblo.

Los médicos lo refirieron hasta el Hospital del El Tocuyo y estuvo recluido hasta el sábado, pero de allí lo trasladaron a Barquisimeto, pues el estado de salud de Juan era crítico. Presuntamente, el cocuy fue ligado con gramoxone que es un herbicida para el control de malezas, de hoja ancha en frutales y cultivos bajos.

Según información médica, el gramaxone afectó los órganos de Juan, entre esos los pulmones y el páncreas. El hombre murió el sábado en la tarde.

Funcionarios del Eje de Homicidios del Cicpc investigan la muerte del hombre.

Alertas

En septiembre del año pasado, el coordinador de la Contraloría Sanitaria nacional y productores de cocuy encendieron las alertas ante la elaboración del licor de manera clandestina mezclado con melaza o urea, lo que pone en alto riesgo la salud de los consumidores.

La preocupación de la venta ilegal del cocuy nace de los riesgos que se corren al consumirlo mezclado con otros ingredientes, lo que puede dañar el sistema renal y traer serios problemas digestivos.

Cuatro meses después de la visita, aún siguen las ventas clandestinas y no hay control sanitario.

 

Con información de La Prensa