Tradición histórica que persiste en el tiempo

Vigilia y serenata, las actividades más esperadas por los feligreses para brindarle honor a la Divina Pastora

Devotos de la Divina Pastora, participan llenos de emoción cada año, en las tradicionales actividades realizadas en honor a la virgen. Tal es el caso, de la serenata y la vigilia. Eventos esperados por muchos para demostrar una vez más su fe y amor.

Carmen González, oriunda del estado Carabobo, detalló sentada en uno de los bancos de Santa Rosa, que trata de llegar a la cuidad cada 12 de enero, fecha en que se realiza la serenata, y el 13 la vigilia. “Son actividades muy hermosas a los que trato de venir todos los años, siempre la camino por promesas, pero al hacer la vigilia siento una conexión con la virgen, y me regreso a mi estado llena de paz, esperando regresar nuevamente”.

Para este año 2023, los eventos se realizaron bajo un concepto católico, los musicales contaron con la participación de la Orquesta Sinfónica, la Orquesta Mavare, la agrupación Carota Ñema y Tajá, el flautista Huáscar Barradas, el padre Badoglio Durán y la Banda Kenosis.  Además de 7 invitados especiales, entre ellos el cuarteto musical “A cuatro voces”, “Barragán”, “Juliana Martínez”, Vanesa Ramírez” y “Luis Alfonso”.

El contenido musical ha sido muy variado. Año tras año el repertorio se ha venido enriqueciendo con cantos marianos, algunos muy espirituales como el Ave María, y otros realizado por algunos compositores.  

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Se pudo visualizar que, todos los feligreses unidos con un mismo propósito, en la ciudad crepuscular, se congregan para homenajear a la virgen, cantarle, realizar oraciones, y cumplir con sus promesas.

Por su parte, las zonas pastorales y personas de distintos estados, se hospedan en la cuidad con ansias de asistir a las actividades previas, ya que, los dos años anteriores, no se realizaron por restricciones sanitarias ante la pandemia del covid-19.

Ciudadanos descansan en la Plaza de Santa Rosa, mientras esperan el inicio de la vigilia, manteniendo el anhelo de agradecer superar la crisis mundial que se vivió estos últimos años, en que perdieron familiares y pasaron circunstancias de preocupación, tristeza y ansiedad.

Paula Edith Gil / NB