Thomas Bach consulta las consecuencias del COVID-19

Thomas Bach se dispone a comparecer ante la prensa tras la histórica decisión de posponer los Juegos Olímpicos de Tokio, el 25 de marzo de 2020 en la sede central del COI, en la ciudad suiza de Lausana.

Thomas Bach consulta las consecuencias del COVID-19. El presidente del Comité Olímpico Internacional (COI) consultó al conjunto de los miembros de la instancia.

El informe aborda las consecuencias de la pandemia, que provocó principalmente el aplazamiento a 2021 de los Juegos de Tokio, confirmaron fuentes concordantes.

Bach inició su ronda de consultas a las 10h00 locales por videoconferencia. Era la primera de tres sesiones de consultas, escalonadas durante todo el día.

El centenar de miembros se reparten en tres grupos, en función de su lengua y de sus husos horarios.

El patrón del movimiento olímpico quiere reunir las opiniones de los miembros sobre todo en lo referente “al proceso de gestión de las consecuencias de la pandemia del coronavirus”.

Bach quiere escuchar “las reflexiones, las ideas y las experiencias de todos los miembros en todo el mundo”, según la misma fuente.

Bach reunió al conjunto de miembros para anunciarles la decisión de aplazar los JJ.OO. a 2021, que estaban inicialmente previstos para este 2020.

Es la primera vez desde el inicio de la crisis sanitaria del COVID-19 que Bach realiza una reunión para hablar de las consecuencias del coronavirus.

Bach acompañado de Christophe Dubi (director de JJ.OO.), Kit McConnell (director de deportes), Christophe De Kepper (director general del COI) y Lana Haddad (directora financiera).

El director médico, Richard Budgett, habló igualmente para abodar “la cuestión de la vacuna” contra el COVID-19, según otra fuente cercana a la organización.

Thomas Bach consulta las consecuencias del COVID-19, quien admitió que los JJ.OO. serían cancelados definitivamente de no disputarse en 2021 si la pandemia no se controla.

El 14 de mayo, el COI había anunciado que destinará 800 millones de dólares a superar la crisis del COVID-19, que tiene un impacto “muy severo” en el movimiento olímpico.

Información: AFP