Siete adolescentes recluidos en el retén de El Manzano aprovecharon la visita del domingo para protagonizar la primera fuga del recinto en el 2018, tercera desde el 10 de octubre de 2017.

Así lo confirmó la directora general del Servicio de Atención Integral al Niño, Niña y al Adolescente de Lara (Saina), Anny Meléndez, quien informó que los siete jóvenes evadidos estaban asignados a la letra D.

La fuga en el centro socioeducativo Pablo Herrera Campins se produjo en plena luz del dia.

Se supo extraoficialmente que los jóvenes cortaron con segueta un tubo del área “D”, luego saltaron una pared y abrieron un boquete en la pared trasera para marcharse por el sector llamado La Churuata. Esto sin esforzarse mucho y tras la visita dominical.

“Tú le das una patada a esas paredes y se caen. Esos se escaparon por las condiciones infraestructurales en las que está el retén. Aquí nadie hace nada”, denunció una persona anónima sobre lo ocurrido.

A familiares de los jóvenes no les han dado mayores detalles de lo suscitado, aunque algunos afirmaron que los chamos están en condiciones infrahumanas (insalubridad, oscuridad, sin agua y en hacinamiento).

“A nosotros nos piden bombillos para poder alumbrarse. No tienen baños y casi nunca los sacan”, denunció una madre de manera anónima.

En los últimos cuatro meses ha recobrado ilegalmente su libertad unos 26 delincuentes que deberían estar en el retén de El Manzano.

Mientras se realizaban las últimas elecciones regionales se evadieron siete, también por un boquete hecho en la pared trasera del recinto.

Luego, en el mismo mes de octubre, se fueron 12 chamos más.

La directora Meléndez se había comprometido a dar más información sobre lo ocurrido; sin embargo, no contestó su teléfono celular como había dicho que haría.

 Informa.El Impulso