“Seré la primera mujer en saltar 16 metros”

Los títulos de Yulimar Rojas son directamente proporcionales a su contagiante alegría y sencillez. Ni el hecho de haberse convertido, apenas a los 23 años, en una de las nuevas leyendas del salto triple femenino, con cuatros campeonatos del mundo en su haber, la ha mareado de éxito. Por el contrario, una de las claves de su deslumbrante progresión en la arena es la humildad para poner en práctica cada día los consejos de su mentor, el cubano Iván Pedroso, que en 2018 la conminó a asumir su carrera con absoluta entrega y profesionalismo.

En un conversatorio, franco y transparente, sostenido en la sede del Comité Olímpico Venezolano, donde recibió otro merecido homenaje por parte de la Junta Directiva, encabezada por Eduardo Álvarez, Yulimar reveló los secretos de este 2019 luminoso que calificó como “el mejor año” de su carrera.

“El 2018 fue muy duro porque las lesiones no me permitieron completar la temporada. Me alejé un poco de Iván Pedroso, pero todo me sirvió para ser más profesional y cuidarme a mí misma”, detalló los problemas que afectaron su rendimiento y la obligaron a realizar un radical cambio en su preparación física y sicológica.

Para enfrentar la temporada de 2019 vivió una transformación personal. “Volvimos a trabajar fuerte con Pedroso, cuatro horas diarias. Fortalecimos las piernas y el abdomen, porque como me repite Iván en cada entrenamiento ‘el éxito se bebe en la copa del esfuerzo’. Y con esta madurez estoy segura de que los 15 metros se van a quedar cortos en 2020. Voy a ser la primera mujer de la historia el saltar 16 metros”.

La caraqueña criada en Puerto La Cruz está orgullosa de haber emulado los cuatro títulos de la mítica triplista rusa, Tatiana Lebedeva, a quien también igualó en otra marca singular: son las dos únicas con seis vuelos de 15 metros o más en una sola temporada.

“Es una saltadora a la que admiro y respeto mucho. Junto a mi entrenador he visto los videos de sus competencias y he tratado de imitar su técnica para mejorar la mía”, recalcó.

El año que viene podría quedar sola en el sitial de títulos mundiales en triple, porque irá por el tercero en fila en pista cubierta en el Mundial de Nankín, China, y su quinto en total. “Allí también quiero superar el récord mundial bajo techo de 15,36 metros de la rusa Lebedeva”

Por ahora, piensa tomar sol y descansar con su familia en las playas de Anzoátegui, tras de ausencia. “Voy a recargar energías para el 2020. Este año solo me faltó más competencias para batir el récord mundial de Inessa Kravets (15,50 m). Lo lindo será ganar oro en Tokio, rompiendo esa marca”, añadió.