Santo del Día | Maximiano, el Obispo constructor

Obispo italiano de Rávena, fue uno de los hombres más prominentes de la época, luchando contra la herejía en la región desde su cargo

Maximiano nació en el 499, en la región de Istria (hoy Croacia), de familia humilde y trabajadora; se cuenta que él y su padre encontraron un tesoro, lo que les dio la oportunidad de viajar a Constantinopla y presentarse ante la corte del Emperador Justiniano.

Fue elegido Diácono en su natal Pula, y luego en el año 545, fue designado Obispo de Rávena por el mismo Emperador y consagrado por el Papa Vigilio, para ese momento contaba con 48 años. Por su condición humilde, no fue aceptado por los raveneses; sin embargo, con su amor por la iglesia y con obras que consistían en construcción de monumentos, iglesias, entre ellas la Basílica de San Vital, joya del arte bizantino, Maximiano se fue ganando el afecto de los creyentes.

San Maximiano de Rávena

Labor Episcopal

Durante su ministerio episcopal, proclamó la unidad de la Iglesia contra los herejes, cumplió con fidelidad su función de pastor y llegó a ser una de las figuras más importantes de Italia en el siglo VI; fue el vigésimo octavo Obispo y el primero de Occidente en llevar el título de «arzobispo» (546-556). Su episcopado representó la edad de oro de la Iglesia de Ravena.

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Autor de muchos escritos, entre ellos libros, crónicas, descripciones de Rávena, catálogos de los obispos de la ciudad y doce volúmenes de sus sermones; al mismo tiempo preparó una cuidada edición de la Biblia acompañada de notas marginales y escribió un “Sacramentario” (misal) sobre el que se basó al poco tiempo la edición leonina del Misal.

Por otra parte, Maximiano es considerado como un pastor que acogía con igualdad a todos, incluyendo extranjeros, pobres, dedicando gran parte del tiempo para consolar a los que sufrían.

Murió en Rávena el 22 de febrero del 556, y sus restos fueron sepultados en la Basílica de San Andrés, donde permanecieron hasta 1809, cuando fueron trasladados a la Catedral de la ciudad, tras la secularización del templo por la administración napoleónica de la región.

Mosaico del Emperador Justiniano con San Maximiano

Maximiano es considerado santo tanto por católicos como por ortodoxos, ya que tuvo gran influencia en Roma y Constantinopla; su memoria litúrgica se celebra el 22 de febrero.

Agelvis Villalonga L.