En su más reciente investigación, Noticias Barquisimeto alertó sobre el avance silencioso del consumo de chimó en la ciudad, especialmente entre jóvenes. El producto, antes asociado a zonas rurales, ha ganado terreno en espacios urbanos, impulsado por su bajo costo, fácil acceso y la falsa percepción de ser inofensivo. Expertos en salud han advertido sobre los riesgos que representa para la salud bucal y general, calificándolo como una “adicción silenciosa” que requiere atención urgente.
En seguimiento a este fenómeno, el equipo de Noticias Barquisimeto realizó un recorrido por las principales calles del centro de la ciudad para conocer cómo se comporta actualmente el consumo de chimó. Según comerciantes consultados, las ventas han experimentado un notable aumento en los últimos meses.
“No importa el sabor, se vende todo”, comentó uno de los vendedores, el chimó se ofrece en diversas presentaciones, con sabores que van desde menta y hierbabuena hasta frutas como uva, limón y mora. Sin embargo, a pesar de este repunte en la demanda, el cigarrillo continúa ocupando el primer lugar en cuanto a consumo de sustancias adictivas en la capital larense.


Por su parte, varios transeúntes manifestaron su rechazo a esta práctica, señalándola como una conducta poco higiénica. “Eso llegan y escupen en plena calle, sin importarles nada”, expresó un ciudadano con evidente molestia.
Otro testimonio apuntó que gran parte del consumo se observa entre jóvenes trabajadores informales, especialmente los conocidos como “caleteros” en la calle 32. “Los muchachos están ahí temprano, y se ponen a consumir antes de trabajar”, afirmó otro consultado.
El uso del chimó como hábito social y laboral reabre el debate sobre la cultura del consumo de sustancias en la ciudad, así como la necesidad de una mayor conciencia pública sobre sus implicaciones sanitarias y sociales.
Rubén Conde/Noticias Barquisimeto