La apliacaciòn Clubhouse de chat por audio a la que sólo se puede acceder por invitación, se hizo muy popular durante los confinamientos por la pandemia de coronavirus, pero ahora esta plataforma tan especializada tiene objetivos mucho más ambiciosos de lo que se podía esperar
Se lanzó en marzo de 2020 en Silicon Valley, Clubhouse busca establecerse como el abanderado del audio digital.
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El concepto es sencillo: una vez que se recibe la invitación, se puede iniciar o escuchar conversaciones en “salas” digitales, que van desde una gran charla de alguien famoso hasta una pequeña reunión entre amigos o familiares
La tecnología cada día va avanzando más y más, de tal forma que podemos ver que los usuarios siguen al pendiente de lo que sucede con las nuevas hondas en la era moderna con las redes sociales que hay hoy en día y las que se van creando
Sin embargo, la aplicación fue rápidamente censurada en China, donde las conversaciones no filtradas sobre temas normalmente tabú, como las protestas por la democracia en Hong Kong y la detención masiva de uigures musulmanes en Xinjiang, hicieron sonar las alarmas del gobierno.
La aplicación, está disponible sólo en Apple, se basa en el concepto de FOMO (fear of missing out), si no estás conectado cuando se produce una conversación, te la pierdes.
Pero más allá de esto, Clubhouse prospera gracias a que los usuarios pueden pasear a su perro o preparar la cena mientras escuchan charlas sobre financiamiento empresarial o el estado de la educación estadounidense, o incluso sintonizar mientras participan en juegos grupales.
A diferencia de los podcasts, todo es en directo y los usuarios pueden participar, siempre que sean invitados por los moderadores del chat.
