El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha declarado una «tregua de Pascua» en Ucrania, por la cual sus tropas detendrán «todas las hostilidades» durante casi dos días.
En un discurso televisado, el mandatario ruso anunció este sábado un alto al fuego unilateral con motivo de la festividad religiosa que recuerda la resurrección de Jesús, el cual se iniciará a las 18:00 del sábado (21:00 GMT) y concluirá a las 00:00 del lunes, reportó Reuters.
«Suponemos que la parte ucraniana seguirá nuestro ejemplo», declaró Putin, quien estaba acompañado por el jefe del Estado Mayor del ejército, el general Valeri Guerásimov.
Hasta el momento, Kyiv no ha indicado si seguirá los pasos de Moscú o no.
Sin embargo, el presidente ucraniano, Volodomyr Zelensky, ya ha puesto en duda la sinceridad del anuncio ruso.
«Los drones (iraníes) Shahed en nuestros cielos revelan la verdadera actitud de Putin hacia la Pascua y la vida humana», escribió Zelensky en su cuenta de X (Twitter).
¿Un gesto de buena fe?
El anuncio de la tregua fue confirmado poco después por el Ministerio ruso de Defensa, el cual indicó que que el cese de todas las acciones militares se basó en consideraciones humanitarias.
Pese a la decisión, las autoridades militares rusas advirtieron que no bajarán la guardia.
«Nuestras tropas deben estar preparadas para repeler posibles violaciones de la tregua y provocaciones del enemigo, así como cualquier acción agresiva», remata el comunicado.
Putin aseguró que este alto al fuego servirá para evaluar la sinceridad del gobierno ucraniano respecto a cumplir acuerdos y participar en negociaciones de paz para resolver lo que él denomina «la crisis ucraniana».
No obstante, en su discurso denunció que el acuerdo para no atacar instalaciones energéticas había sido violado por su contraparte insistentemente.
«Sabemos que el régimen de Kyiv ha violado el acuerdo sobre en la infraestructura energética más de 100 veces», aseveró.
Y en otro gesto inusual, el Ministerio ruso de Defensa afirmó haber realizado un intercambio de 246 prisioneros de guerra.
De acuerdo con el reporte de Moscú, 31 ucranianos heridos fueron intercambiados por 15 rusos heridos como «gesto de buena voluntad».
Zelenski calificó el regreso de los uniformados ucranianos como «una de las mejores noticias posibles».
«Agradezco a todos los que hicieron posible esto», escribió, y mencionó «especialmente» a los Emiratos Árabes Unidos.
Según el presidente ucraniano, 4.552 personas, entre soldados y civiles, han regresado a casa tras estar encarceladas en Rusia desde el comienzo de la guerra.
La realidad en el terreno
Horas después del anuncio de Putin los combates seguían en Ucrania.
«No hay tregua: en todas las direcciones, la Federación Rusa sigue disparando, como antes», denunció Andriy Kovalenko, director del Centro para Contrarrestar la Desinformación de Ucrania, en un mensaje a través de Telegram.
Una denuncia similar realizó la diputada Lisa Yasko, quien afirmó que las sirenas antiaéreas han vuelto a sonar en la capital ucraniana y en otras ciudades.
«Un alto el fuego de un día, aunque se produzca, es como una broma», declaró la legisladora a la BBC.
Por su parte, el ministro ucraniano de Exteriores, Andriy Sybiha, evitó aclarar si su gobierno se sumará o no a la tregua anunciada por Putin. Y, por el contrario, consideró que la misma revela las intenciones del mandatario.
«Putin ha hecho ahora declaraciones sobre su supuesta disposición a un alto el fuego. 30 horas en lugar de 30 días. Por desgracia, tenemos una larga historia de que sus declaraciones no coinciden con sus acciones», agregó.
Una posición comprometida
La sorpresiva decisión de Putin se produce horas después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazara con poner fin a sus negociaciones para intentar conseguir un alto al fuego en Ucrania, si Moscú y Kyiv no daban muestras de querer poner fin a las hostilidades a la brevedad.
«Estamos hablando de que la gente morirá. Idealmente, vamos a evitarlo», dijo Trump el viernes.
«Ahora bien, si por alguna razón una de las dos partes lo dificultan mucho, simplemente les diremos: ‘Son unos tontos, unos necios, son gente horrible’, y simplemente los ignoraremos», agregó.
Esta no es la primera tregua de esta naturaleza que Putin anuncia aprovechando alguna festividad religiosa importante para sus ciudadanos.
La primera ocurrió a principios de 2023, coincidiendo la Navidad ortodoxa. En esa ocasión el Kremlin prometió sus cañones callarían durante 36 horas. Sin embargo, esto no ocurrió.
Las tropas rusas lanzaron varios ataques contra las entonces disputadas ciudades de Bajmut y Soledar, al este de Ucrania.
Lo anterior explica la cauta reacción al anuncio.
«El que las sirenas antiaéreas se hayan oído en toda Ucrania pocos minutos después de que se anunciara la llamada tregua de Pascua demuestra lo serio que es realmente Putin», se quejó el ministro checo de Exteriores, Jan Lipavský.
Aunque Kyiv ya ha aceptado la vaga propuesta de alto el fuego presentada por EE.UU. y ha culpado a Moscú de obstaculizar los esfuerzos de paz, su silencio actual podría ponerla en una posición comprometida.
«Las tropas ucranianas no depondrán repentinamente sus armas, pero sí deja potencialmente al presidente Zelensky en una posición difícil, en la que, si Rusia le acusa de romper el alto el fuego, una Casa Blanca favorable a Moscú podría echarle la culpa», advirtió James Waterhouse, corresponsal de la BBC en Kyiv.
En similares términos se pronunció, el editor para Rusia de la BBC, Steve Rosenberg.
«Es probable que el presidente Putin utilice esta tregua unilateral para convencer a la Casa Blanca de que Rusia -que lanzó una invasión a gran escala de Ucrania hace más de tres años- se toma en serio lo de poner fin a la guerra», escribió.

Información de: BBC