El papa Francisco llegó este sábado a la ciudad de Trujillo, al norte de Perú, donde fue recibido con una demostración del típico baile de la marinera norteña, en el segundo día de actividades de la gira oficial y apostólica a Perú.

El avión que traslada a Francisco aterrizó a las 8.48 hora local (13.48 GMT) en el aeropuerto “capitán Carlos Martínez de Pinillos” con la delegación papal para una visita que se extenderá durante todo el día en Trujillo, ubicada a 570 kilómetros al norte de Lima.

“Les deseo que tengan un día bueno y que me acompañen a Trujillo, pero no en el avión sino con la oración”, dijo el papa a los fieles congregados frente a la Nunciatura, antes de partir en un automóvil cerrado negro a abordar su avión.

Luego, se tomó el tiempo para dar la mano a sus fieles, en su mayoría niños, tomarse fotos con ellos y bendecirlos.

El papa oficia en Trujillo, a 560 kilómetros al norte de Lima, su primera misa en Perú donde se espera congregar medio millón de personas.

El lugar que eligió fue una playa donde se pueden congregar 500.000 personas, en la ciudad histórica de Huanchaco, un paraíso de surfistas donde se amarran los “caballitos de totora”, embarcaciones tradicionales de pescadores en forma de canoa.

Después de la misa, el papa visitará el barrio de Buenos Aires, en el sur de Trujillo, muy afectado por las inundaciones de abril del año pasado.

El pontífice tendrá un encuentro con sacerdotes y religiosos del norte del país y una celebración mariana, antes de regresar a Lima.

El domingo pondrá fin a su sexto viaje a la región, que también incluyó Chile, con una multitudinaria misa en la base aérea de Las Palmas en la capital peruana, donde se espera a un millón de personas aproximadamente.

El Universal