Luis Arráez volvió a destacar con el madero, al ligar de 5-3 con anotada y empujada, consolidándose como uno de los bateadores más difíciles de ponchar en las Grandes Ligas.
El venezolano puso su promedio en .280 y sigue liderando las Mayores en apariciones por ponche, con más de 280 turnos y solo cinco abanicados hasta ahora en la temporada.
Luis Arráez sumó su décimo juego del año con tres o más hits, y el número 88 de su carrera. Solo Freddie Freeman (91) tiene más desde 2019. Su capacidad de contacto lo mantiene como pieza clave en la alineación de San Diego.
A lo largo de sus últimos 19 juegos, ha conectado ocho dobles y remolcado 10 carreras. En 14 de esos encuentros ha dado al menos un hit. En total, acumula 922 hits en su carrera de seis campañas.
No se poncha desde hace 89 apariciones al plato, la racha activa más larga en todas las Grandes Ligas. Nadie más se acerca: Santiago Espinal tiene apenas 40 turnos sin abanicar.
No ha recibido dos ponches en un mismo juego desde julio de 2024. Su tasa de ponches por turno es la más baja en MLB por tercer año seguido.
Arráez también forma parte del reducido grupo de siete peloteros con más boletos que ponches en la temporada, y es el único con un índice BB/K superior a 2.00.
«Su disciplina es de otro nivel», declaró el mánager Mike Shildt. “Cada turno suyo desgasta al lanzador. Es un arte lo que hace con el bate”. Arráez busca su cuarto Juego de Estrellas consecutivo.

Hender «Vivo» González
Con información del Emergente