El enorme hueco ubicado en la carrera 27 con calle 28, en las adyacencias de la avenida Venezuela y la Catedral tiene a los vecinos de cabeza, pues lo que comenzó con algo pequeño se ha convertido en una tremenda tronera que el pasó se ha obstruido casi en su totalidad.
El señor Cristóbal Peña, detalla que desde que el recuerdo la vialidad siempre ha estado dañada, desde hace unos 5 años, en una oportunidad comenzaron los trabajos y rompieron, pero en los últimos meses eso sé que quedó en el olvido.
Al problema de la vialidad se le sumó que en el lugar se improvisó una parada para los transportistas que prestan servicios hacia el norte de la ciudad, pues el paso diario de personas y vehículos a desmejorado la vialidad a la que al parecer nunca le han dado un cariñito y todo se ha venido deteriorando con el paso del tiempo.
Peña, quien hace vida diaria el sector explica que la ausencia de paradas hace que los pasajeros que todos los días hacen su colita para esperar el transporte público lleven y sólo se mojen, la calle no es cómoda y eso se convierte en un colapso. “Es necesario que la alcaldía verifique los verdaderos problemas, nos encontramos en pleno centro de la ciudad y la vialidad es prioridad,” culminó.
Zuleydy Márquez
