Cualquier actor quiere ser parte de un universo tan estable como el de Marvel, que desde el 2008 encontró la fórmula y no paró de crecer con películas, historias y personajes. Ahora, las condiciones para hacerlo son de lo más extrañas, y así lo evidenció la reciente entrevista de Benedict Cumberbatch, quien por un embargo firmado no pudo ni mostrar su cara. Desde SensaCine revelaron cuáles son las cláusulas más extrañas a la hora de firmar un contrato.
Desde puntos obvios, como la imposibilidad de firmar acuerdos con la empresa rival, DC, hasta otros que tienen que ver con el secretismo y el no develar nada, a Marvel no se le escapa ningún detalle. Por ejemplo, los guiones son presentados en habitaciones en las que no hay ventanas y está prohibido ingresar con teléfonos móviles. Pero además, una vez acordada la participación, los actores y el equipo de rodaje reciben los libretos a última hora.
El estudio presidido por Kevin Feige también les exige a sus actores que estén siempre disponibles. Esto quiere decir que, ante la eventual necesidad de volver a hacer alguna toma en particular, puedan ser encontrados con facilidad. En esta misma línea, está la preferencia de mantener un look estable, para evitar problemas de continuidad, así como el estar siempre en forma.
Entre las imposiciones más “personales” de Marvel, las que se destacan son las de tener que promocionar obligatoriamente las películas que filman, al tiempo que no pueden estar involucrados en inconvenientes que afecten la imagen del personaje y la franquicia. Esto, por ejemplo, hace que no puedan fumar en pantalla, medida que varios estudios tomaron en los últimos años, para fomentar una cultura más saludable.
La imagen ante todo
En medio de todas estas exigencias que surgen para ser parte de Marvel, uno de los que habló recientemente fue Chris Hemsworth, que se hizo famoso gracias a su papel como Thor. Parece que el artista está un poco molesto con la idea de que no lo toman muy en serio como actor y solo se preocupan por su forma física. “La musculación se ve como una vanidad, mientras que si subo un montón de peso poco saludable o me pongo muy delgado para un papel, probablemente, dirán que soy un actor serio”, aseveró.
