El incendio forestal que comenzó el sábado pasado en la cumbre de la isla española de Gran Canaria quedó controlado este miércoles, después de quemar 1.164 hectáreas de superficie forestal.
Las autoridades regionales del archipiélago atlántico de las Canarias informaron de que todavía se tardará varias jornadas en apagar el fuego y mantienen el mismo nivel de emergencia debido a la ola de calor prevista para días próximos.
El consejero canario de Administraciones Públicas, Presidencia y Justicia, Julio Cruz, explicó en rueda de prensa que los equipos de extinción terrestres y aéreos utilizaron hasta ahora 1.250.000 litros de agua para dominar el fuego, que afectó a los municipios de Artenara, Tejeda y Gáldar y obligó a desalojar a un millar de personas.
Todas las carreteras se encuentran cerradas a causa del siniestro fueron reabiertas y no queda ninguna zona evacuada.
Sin embargo, el Gobierno regional mantiene la prohibición de las actividades recreativas, lúdicas, festivas, turísticas y deportivas, sobre todo aquellas que supongan una concentración importante de personas.
Asimismo recomienda evitar el tránsito de personas y vehículos, excepto en casos estrictamente necesarios, en la zona afectada por el incendio, así como por el perímetro de seguridad establecido en los tres municipios citados.
El fuego fue causado, al parecer, por la imprudencia de un hombre cuando utilizaba una máquina radial. El sospechoso fue detenido y luego puesto en libertad provisional tras pagar una fianza judicial de 25.000 euros (unos 28.000 dólares).
«Se le investiga por posible delito de incendio y se dictó prisión», indicó a la AFP un portavoz de la autoridad judicial en Canarias, archipiélago situado en el océano Atlántico, frente a las costas africanas.
«Lo único que se baraja hasta ahora ha sido negligencia» como la causa del fuego, apuntó la fuente.
Con información de EFE y AFP.
