La OMS teme que las vacunas pierdan eficacia ante ómicron

La OMS trabaja con sus asociados técnicos para conocer los efectos que pueda tener esta variante en las medidas adoptadas para combatir la enfermedad, incluidas las vacunas.

Leer También: Estados Unidos confirma su primer caso de ómicron

La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció que las vacunas anticovid podrían ser menos eficaces ante la nueva variante ómicron, aunque insistió en que no debe cundir la alarma, aclarando que seguirían protegiendo de formas graves de la enfermedad.

En su informe epidemiológico semanal, la OMS, que por ahora ha recibido notificaciones de casos de la nueva variante desde 23 países, indica que algunas mutaciones de ómicron «podrían aumentar su capacidad de transmisión y/o permitirle cierto grado de escape a la inmunidad»

En otras palabras, se cree que las vacunas existentes -que además pueden ser modificadas en los próximos meses para adaptarse a la variante ómicron- pueden ser menos eficaces a la hora de prevenir el simple contagio de COVID-19.

Situación que se enfrentó con la variante delta, que desde que se ha convertido en la dominante en el mundo (más de un 99 % de los casos globales actuales) redujo la protección ante contagios del 60 al 40 por ciento, según indicó la semana pasada la propia OMS.

Estudios en marcha

La OMS está coordinando a un gran número de investigadores de todo el mundo para conocer mejor la variante ómicron. Ya se han iniciado o se pondrán en marcha breves estudios para evaluar la transmisibilidad, la gravedad de la infección (incluidos los síntomas) y la eficacia de las vacunas, las pruebas diagnósticas y los tratamientos.

De esta manera la OMS anima a todos los países a que contribuyan a recoger e intercambiar datos de enfermos hospitalizados a través de la Plataforma mundial de datos clínicos de la OMS sobre esta enfermedad, con el fin de que podamos conocer cuanto antes las características de la enfermedad, que causa y el desenlace clínico de los pacientes.

Medidas recomendadas para los países

Puesto que la variante ómicron se considera preocupante, la OMS recomienda varias medidas a los países:

Aumentar la vigilancia y la secuenciación de las muestras tomadas de los casos; intercambiar las secuencias genómicas en bases de datos abiertas, como la GISAID; notificar a la OMS los casos o conglomerados de casos iniciales; y llevar a cabo estudios de terreno y evaluaciones analíticas para conocer mejor si la variante ómicron presenta características distintas en lo relativo a su transmisibilidad y a la enfermedad que causa o si afecta a la eficacia de las vacunas, los tratamientos, las pruebas diagnósticas o las medidas sociales y de salud pública.

Los países deberían continuar aplicando las medidas de salud pública de eficacia demostrada para reducir de forma general la circulación del virus causante de la COVID-19, basándose en el análisis de los riesgos y en un enfoque científico.

Además, deben aumentar su capacidad de respuesta mediante recursos médicos y de la salud pública para hacer frente a posibles aumentos en el número de casos.

La OMS continúa proporcionando a los países apoyo y orientaciones tanto para prepararse frente a las infecciones como para actuar frente a ellas. Puede encontrarse más información al respecto en en el comunicado hecho público el 26 de noviembre.

Información de UROPS

La OMS teme que las vacunas pierdan eficacia ante ómicron.