El pívot de los Philadelphia 76ers supera en la votación final a Nikola Jokic y Giannis Antetokounmpo. Se convierte en el quinto jugador de la franquicia en recibir dicho galardón.
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El dominio y la fuerza desmedida. El hueco que el pasado se ha hecho en un presente que reniega de sus raíces. Ese es Joel Embiid, el MVP de la NBA 2022-23. El interior de los Philadelphia 76ers se lleva el primer galardón de su carrera por delante de Nikola Jokic y Giannis Antetokounmpo. Toda época debería premiar a sus mejores jugadores, como un reparto por plazos. Embiid ya tiene el suyo, como Giannis y Jokic. Eso es lo coherente.
Embiid ha finalizado su séptima temporada en la NBA con un promedio de 33,1 puntos por noche con una precisión del 54,8% en TC, 33% en T3 y 85,7% en TL. Además, registró 10,2 rebotes y 4,2 asistencias. A lo que suma un rendimiento atrás no menos reseñable. Embiid ha liderado la liga en anotación por segundo año consecutivo, algo que no se conseguía un jugador interior desde Bob McAdoo en 1975 y 1976.
Embiid también lideró a los 76ers a un gran éxito colectivo. Sus 54 victorias fueron la tercera marca en la liga (la mejor de la franquicia desde 2001) y muchas de ellas llegaron gracias a su rendimiento en el clutch (mejor +/- de cualquier jugador en el clutch y sus 131 puntos fueron la séptima marca más elevada).
Un hito histórico. Ha sido el mejor año de su carrera. Se consolidó como el mejor anotador del momento. Mejoró su eficiencia. Mantuvo su dominio defensivo. Tuvo noches asombrosas. El interior más dominante de la NBA.
La lista completa
Jayson Tatum, de los Boston Celtics, y Shai Gilgeous-Alexander, de Oklahoma City Thunder, cierran el Top 5. Muy lejos, sin embargo, del pívot francocamerunés. Embiid ha sido un jugador dominante por años, pero previamente no había podido ganar el premio a MVP. Ahora es tiempo de reconocer su grandeza.
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