Henri Falcón califica de irresponsable aprobación del TIAR: “Ya basta de crear falsas expectativas”

 

El presidente de la organización política Avanzada Progresista, Henri Falcón, se manifestó sobre el reinicio de las conversaciones de negociación política, entre el Gobierno de Nicolás Maduro y parte de la dirigencia de oposición venezolana.

Insistió en la celebración de un acuerdo político, que garantice la resolución de los problemas económicos y sociales; así como la fijación de una fecha electoral, bajo la observación internacional de las Naciones Unidas y la Unión Europea.

Simultáneamente, catalogó como una irresponsabilidad política la aprobación del TIAR. Considera que el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca, no tiene propósitos ni finalidades pacíficas, por el contrario, podría entorpecer cualquier acuerdo de negociación, que permita un cambio de gobierno sin violencia.

“El TIAR es un acuerdo militar sin finalidades pacíficas, que nace al calor de la Guerra Fría en 1947, incluso antes de la creación de la OTAN; es por ello que rechazamos este tratado por obsoleto e ineficaz, cuya aprobación entorpecería cualquier proceso de entendimiento”, expresó Henri Falcón.

Destacó que Venezuela no es un pueblo violento y que la mayoría apuesta a una salida negociada y pacífica. “Hay que hablarle con franqueza a los venezolanos; ya basta de irresponsabilidad política y de crear falsas expectativas”.

Entre tanto, ratificó su apoyo a la iniciativa del Reino de Noruega, de facilitar un acuerdo político en Venezuela, el cual tiene previsto desarrollarse en Barbados como una continuación de todo el proceso de paz; añadiendo que tales esfuerzos deberían también ubicarse en territorio nacional, de forma inclusiva.

“Así como respaldamos Oslo, apoyamos las conversaciones en Noruega, y todo tipo de iniciativas que garanticen resultados concretos; pero es necesario nacionalizar la negociación e incorporar a todas las fuerzas políticas del país”.

Finalmente, indicó que se deben fijar las fechas para la celebración de las elecciones presidenciales y de la Asamblea Nacional; ambas bajo la observación y supervisión de la Naciones Unidas y de la Unión Europea, y con la presencia de representantes de Rusia, China, Canadá y Estados Unidos.

Considera que los comicios deben celebrarse en un plazo prudencial, permitiendo que tanto la ONU como la UE y el resto de observadores, tengan tiempo para preparar sus misiones bajo los principios de neutralidad, independencia y autonomía del proceso electoral; donde exista la modificación de los sistemas de registro y votación, para que más de 4 millones de venezolanos en el exterior puedan sufragar.