Francia despertó este lunes con la cabeza baja, la mirada perdida y el alma adolorida.

Hablamos de la Francia futbolera, la que todavía no puede asimilar cómo su selección fue incapaz de anotar un gol y vencer a Luxemburgo, la selección 136 del ranking de la FIFA, en el proceso de clasificación al mundial de Rusia 2018.

Una humillación en todo sentido de la palabra que no refleja el abismo futbolístico que hay entre estos dos países, históricamente y por el valor de sus jugadores.

Jugadores de Luxemburgo
Para los jugadores de Luxemburgo el empate fue tan importante como clasificar al propio mundial.

A eso hay que agregarle que hace pocos días esa misma Francia goleó a Holanda 4-0, lo que hizo aún más difícil de digerir el sorpresivo empate.

Pero pese al resultado, la selección gala todavía lidera el grupo A de las eliminatorias europeas por delante de Suecia y Holanda, y salvo una sorpresa similar a la que sufrió frente a su modesto vecino del norte lo más seguro es que esté presente en la cita mundialista del próximo año.

Hasta ahora Bélgica es la única selección europea en sumarse a Rusia en el mundial, torneo al que también se supone llegarán todas las consideradas potencias de ese continente como España, Inglaterra, Alemania, Portugal e Italia, si bien para estas dos últimas será necesario hacerlo a través de los playoff si mantienen sus actuales posiciones en la clasificación.

Chile y Paraguay
Chile, los actuales bicampeones de América, está obligado a ganar en Bolivia para aspirar a clasificar al mundial.

Esta situación contrasta con lo que se está viviendo en el proceso de clasificación en Sudamérica donde hay siete países que todavía sueñan con asegurar el boleto a Rusia, sea a través de uno de los tres cupos que quedan por definir o bien del repechaje que se jugará contra el representante de Oceanía, Nueva Zelanda.

Salvo Brasil -que en el inicio de las eliminatoria llegó a estar por fuera de la clasificación- ninguno de los países que estuvieron en el pasado mundial tiene asegurada su participación el próximo año, ni Argentina ni Uruguay ni Colombia ni Chile ni Ecuador.

Camino con obstáculos

Esta paridad en Sudamérica, y contraste con Europa, avivó en los últimos días la discusión sobre dónde se disputan las eliminatorias más difíciles para clasificar al Mundial de fútbol, un debate que comenzó a tomar forma desde que la Conmebol implementó el formato de todos contra todos para la copa que se jugó en Francia en 1998.

Hasta el legendario futbolista alemán Lothar Matthaeus se decantó el año pasado por “la eliminatoria sudamericana”, que consideró como “la más difícil del mundo”.

Coutinho, Neymar y Gabriel Jesus
Brasil clasificó con comodidad, pero al principio de las eliminatorias sufrió más de la cuenta.

Pero lo cierto es que en Europa también hay argumentos para calificar su proceso clasificatorio como el más complicado, algo que también podría afirmar África o incluso Oceanía.

Los números y razones están para sustentar cualquiera de la posturas, de ahí que haya una gran masa de defensores a ambos lados del océano Atlántico.

En una encuesta publicada en marzo de este año en el diario deportivo español Marca, la mayoría de los participantes consideró que era más difícil de clasificar al mundial en Sudamérica (67% por 33%).

La postura se basa en la calidad de las selecciones que participan, así como de la paridad que hay entre ellas.

Lionel Messi
Lo más seguro es que Argentina termine clasificando al Mundial, aunque todavía no lo tiene garantizado.

Todos los países sudamericanos se encuentran entre los primeros 70 lugares del ranking de la FIFA y cuatro de ellos están entre los 10 primeros de la lista.

Es decir que no hay selecciones de menor cartel como sucede en Europa -San Marino y Gibraltar están ubicados en los lugares 204 y 206- o en otras confederaciones.

Otra razón es lo largo de las eliminatorias (dos años y 18 partidos) y lo difícil que resulta jugar de visitantes en campos que cuentan con una rivalidad histórica que trasciende del fútbol.

Potencias como Brasil y Argentina se tienen que medir entre ellos, así como Paraguay contra Uruguay, Perú y Chile en el “Clásico del Pacífico” o el mismo duelo entre Colombia y Venezuela.

Más o menos

En Europa no discuten el nivel del fútbol sudamericano y lo complicado de su proceso de clasificación, pero resaltan que de las 10 selecciones que participan hay cinco que suelen llegar al mundial, sea a través uno de los cuatro cupos directos o por vía del repechaje.

Es decir, que de no ocurrir algo inesperado, el 50% de los miembros de la Conmebol estará en Rusia el próximo año.

Eso contrasta con los 13 equipos que se sumarán al país anfitrión de los 54 países que conforman la UEFA (un 24%).

Francia vs. Bulgaria 1994
La selección francesa, con Laurent Blanc y Eric Cantona, no pudo clasificar a EE.UU. 94 al perder sus dos últimos partidos como local contra Israel y Bulgaria.

Otro punto es que si bien es verdad que las potencias se tienen que enfrentar a equipos de menos categoría, también lo tienen que hacer frente a rivales que suelen ser protagonistas en mundiales y torneos internacionales.

Y al tratarse de un formato más expandido (nueve grupos en los que clasifica directamente el primero) hay menos margen de error.

Sin embargo, los países más importantes futbolísticamente suelen tener una segunda oportunidad en la repesca y esa no la suelen desaprovechar.

¿El resto?

Tanto en Sudamérica como en Europa también mencionan los títulos que han ganado para diferenciarse del resto de las confederaciones (11-9 en favor de los europeos) y justificar su mayor presencia en el Mundial.

Pero al tratarse el debate sobre el proceso de clasificación y no la fase final se podría decir que el lugar más difícil para clasificar es en África.

De los 54 miembros que posee la Confederación Africana de Naciones sólo avanzan cinco (9,2%), cupos que logran los ganadores de cada uno de los cinco grupos en la ronda final de clasificación.

Egipto en la Copa Africana
Egipto es una de las máximas potencias del fútbol africano, pero sólo ha clasificado dos veces a los mundiales.

Lo complicado es que el nivel de las selecciones africanas se ha emparejado mucho en los últimos años y hay grupos en los que coinciden varias potencias de la región.

Por ejemplo, el grupo B lo conforman Nigeria, Argelia y Camerún junto a Zambia, mientras Marruecos se está eliminando contra Costa de Marfil o Mali y Ghana no lo tiene nada fácil frente a Uganda y Egipto.

La historia de estos últimos refleja claramente lo difícil de las eliminatorias ya que a pesar de ser el mayor ganador de la Copa Africana de Naciones (con 7 títulos) sólo ha clasificado dos veces para el mundial (a Italia en 1934 y 1990).

Pero si en África el panorama no luce nada claro, más cuesta arriba se le presenta a los países en Oceanía ya que no les basta con ser el mejor de su región, pues eso no les asegura un cupo de acceso directo.

Javier Hernández
México ya aseguró su participación en el mundial de Rusia y lo más seguro es sea acompañado en la Concacaf por Estados Unidos y Costa Rica.

Para lograr llegar al mundial deben definir su boleto contra selecciones de otras confederaciones que por lo general poseen un nivel superior y teniendo en cuenta las posiciones actuales, Nueva Zelanda (que ocupa el lugar 139 de la FIFA) se tendría que enfrentar a Argentina (número 3 del ranking).

Algo que parece poco probable más allá de los 24 goles que anotó a favor y los sólo cuatro en contra que recibió para llegar hasta aquí.

Esto demuestra que se puede discutir en cuál eliminatoria es más difícil clasificar a un Mundial, dependiendo del punto de vista con el que se mire, pero una situación muy diferente ocurre cuando se busca saber cuál proceso clasificatorio es mejor.

En este caso parece haber una sola respuesta. Y ustedes ya la saben.

Información de: BBC