A casi una semana de haberse llevado a cabo las elecciones presidenciales en Honduras, aún el Tribunal Supremo Electoral (TSE) de esa nación no ha emitido el boletín final con los resultados de dichos comicios, por lo que se sospecha la derecha prepara un fraude para dar como vencedor de la contienda al actual presidente Orlando Hernández.
Ante tal situación el pueblo hondureño salió a las calles para protestar, sin embargo ha sido brutalmente reprimido por las fuerzas militares y policiales.
Según información que circuló este primero de diciembre a través de medios alternativos, la joven Kimberly Fonseca fue asesinada por fuerzas de represión del gobierno derechista.
El pasado domingo se celebraron en el mencionado país centroamericano las elecciones presidenciales. Los primeros conteos daban ventaja al candidato de izquierda Salvador Nasralla. No obstante, y a pesar de que el TSE se comprometió a dar los resultados definitivos al día siguiente, todavía se desconoce el nombre del ganador.
Los hondureños han salido a las calles a manifestar su indignación ante lo que consideran un fraude electoral, no sólo por el irrespeto a su voluntad expresada en las urnas, sino también por el hecho que el presidente en funciones se lanzó a la reelección a pesar de que esa figura no está contemplada en la Constitución.
