El mexicano gana de rosa y mete tiempo a un Carapaz que supera a Yates y es segundo en la general.
El Giro es cosa de dos y habla castellano. Isaac del Toro y Richard Carapaz van a pelear por el rosa en los dos tapponi alpinos que quedan por delante. El mexicano, tras arrojar dudas en la altísima montaña, ha defendido el rosa con un orgullo excelso, que le ha llevado a ganar su primera etapa en una grande en Bormio.
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Se escapó con Carapaz en el último puerto y venció a su gran rival por la gloria en Roma, tras soltarlo a 1,3 kilómetros de meta y celebrar de rosa en los Dolomitas. Después de tres segundos puestos, Del Toro sube el nivel del Giro estratosférico que está firmando y es más líder.
Tienta en el Mortirolo
Carapaz bromeaba en zona mixta con los periodistas. Se le veía feliz, confiado. “Hoy no es día para atacar ¿No, Richard?”, “Seguro que no”, contestó el líder de EF cruzando los dedos. La reconquista del Giro por parte del ecuatoriano comenzó en San Valentino y ha tenido su segundo capítulo en el Mortirolo.
Esa montaña mítica, cuyo nombre evoca terror entre los ciclistas, volvía hoy a pasar lista como puerto de paso por la vertiente de Monno, la menos terrible. Ahí comenzó la tienta del Torito, por parte de Carapaz.
Tiberi había entrado en crisis quedando fuera de todo (otro favorito al palco en la tercera semana) y fue Pellizzari el que atacó. El ecuatoriano mandaba cerrar a Chalequito Cepeda que cogió rápido la rueda italiana. Después llegó su primer estacazo, rabioso, como siempre. Yates se sujetaba como podía y Del Toro se agarraba al bordillo, a cola del grupo.
Siguió tensando en el descenso, Carapaz con un Steinhauser que se dejó caer desde la fuga que ya comenzaba a marchitar. Adam Yates, en primera persona, lograba cerrar el hueco salvando los muebles a su líder.
Parece que no tuvo bastante UAE que comenzó Le Motte (3,1 km al 8,1%) tirando en lo que parecía un regalo para Carapaz. Pues no. Activaron su plan. Dejaron a Del Toro sólo con el de EF y el líder del Giro exprimió al ecuatoriano que, atento y sólido, se agarró a su rueda y juntos marcharon para eliminar a Simon Yates.
El Torito firmó un descenso estratosférico para terminar soltando a Carapaz en el llano en una demostración de confianza y potencia. Brillante triunfo del líder de un Giro que sigue precioso.
Hender «Vivo» González
Con información de Marca
