La energía solar es una de las fuentes energéticas alternativas que buscan ser fomentadas por las potencias para contrarrestar los efectos del cambio climático.
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Granjeros y movimientos rurales a lo interno de Estados Unidos, se oponen a la expansión solar.
A través de un trabajo especial la agencia Reuters destaca la disconformidad de sectores por el uso de las tierras rurales para la implementación de paneles solares.
Kansas, Maine, Texas, Virginia y otros lugares del territorio estadounidense, buscan presionar para bloquear iniciativas que impliquen expandir este tipo de proyectos.
La construcción de los primeros grandes proyectos solares, incluido Solar Star, completado en 2015, atrajo poca oposición; dado que se ubicaron principalmente en áreas remotas como el desierto de California.
Pero, ahora, las tensiones están aumentando a medida que el sector planea proyectos más grandes y llega a áreas rurales más pobladas que no están familiarizadas con la energía solar.
Avanzar en neutralidad de carbono
Tanto funcionarios de la Casa Blanca y como del Departamento de Energía, están presionando por una rápida expansión de la energía solar en Estados Unidos.
A su vez, estiman que esta podría alcanzar el 45% para 2050 para cumplir con los objetivos de la administración de Joe Biden de eliminar o compensar las emisiones para 2050.
Con información de: VN
