Ramón Biarnés, director general de Cinesa, explica cómo la compañía ha tenido que reinventarse y abrirse a nuevas fórmulas para hacer frente a las fuertes caídas por culpa del Covid-19.
La gran pantalla vive un año fatídico. La crisis del coronavirus en España se ha traducido en una caída de la recaudación de las salas del 57,5 %, con 7 millones de espectadores, menos de la mitad que hace un año, según datos del Ministerio de Cultura y Deporte.
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“Cuando se declaró el estado de alarma no sabíamos durante cuánto tiempo iba a ser, y una vez abiertos de nuevo, respetamos una serie de restricciones que no nos permiten llenarla sala, por lo que se obtienen menos ingresos” Explicó Biarnés
Para hacer frente a la situación, Cinesa ha decidido acelerar los planes de transformación que la compañía tenía previstos, dando a sus salas una nueva utilidad.
La compañía además ha puesto en marcha una plataforma de ecommerce donde alquilas las salas o reservarlas para eventos.
“Nos hemos ofrecido a los particulares y ofrecemos nuestras salas en exclusiva para que un cliente la alquile con amigos o familia“.
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También abrieron sus puertas a la iglesia evangelista y los jueves y los domingos celebran sus actos en el cine.
Otra opción, para jóvenes y no tan jóvenes que juegan a videojuegos, es ofrecerles que jueguen en las grandes pantallas. Esto funcionó muy bien como regalo de Navidad.
Con información de EXPANSION.com