Comprar en efectivo se ha convertido en una opción para los que ganan sueldo mínimo. La escasez de billetes que hay en las calles del país hace que los comerciantes ofrezcan su mercancía con un descuento de hasta 50% siempre y cuando el producto sea cancelado con papel moneda.
En El Manteco, emblemático lugar del centro de Barquisimeto, las transferencias con efectivo están a la orden del día. Harina de maíz, papel higiénico, pasta o arroz son ofrecidos a precio razonable; el único problema para las personas es conseguir el efectivo para pagar.
“Aquí nada cuesta más de 500 mil bolívares”, asegura Eugenio González, vendedor de pasta y harina en El Manteco. El hombre cuenta que él ofrece los productos a precio económico porque cuando cancela en efectivo la mercancía siempre es más barata.
“Un bulto de pasta en efectivo no llega a los 6 millones. El problema aquí está en vender la mercancía rápido porque hay días en los que no se vende nada”, dice.
Lo económico que resulta para muchos comprar en efectivo ha potenciado la venta de billetes en las calles y es que, ahora mismo, hay personas ofreciendo dinero a un porcentaje que alcanza la barrera del 150%. “La gente va y comprar el efectivo porque sinceramente es mejor para ellos pagar una pasta en 500 mil que dar el millón por un kilo”, suelta González.
La Prensa
