En el corazón del estado Lara, una fuerza de élite opera con una discreción casi total, su nombre rara vez resuena en los titulares, pero su impacto se siente en la disminución de amenazas latentes.

Se trata del Grupo de Operaciones Estratégicas (GOES), una unidad de élite de seguirad de estado, adscrita al Ministerio del Poder Popular para Relaciones Interiores, Justicia y Paz, cuya misión fundamental es desmantelar la criminalidad antes de que eche raíces.
A diferencia de otras fuerzas de seguridad, cuyas operaciones suelen ser de dominio público, el GOES se mueve con un esquema preventivo y su éxito se mide por los crímenes que no ocurren. En Lara, su enfoque está en la identificación y neutralización de acciones delictivas antes de que se materialicen. Esto implica un trabajo de inteligencia minucioso, análisis de patrones criminales y una capacidad de respuesta rápida y precisa.
*La Inteligencia como Primera Línea de Defensa*
Fuentes conocedoras del tema de seguridad, explican que el GOES en Lara no es una unidad de patrullaje convencional. «Su principal arma es la información», comenta uno de los especialistas en la materia. «Están constantemente monitoreando, analizando y prediciendo movimientos delictivos. No esperan a que un secuestro o un robo se concrete; buscan desarticular la banda antes de que actúe».
Este enfoque proactivo implica una estrecha colaboración con otros cuerpos de inteligencia y seguridad, así como el uso de tecnología avanzada para la recopilación y procesamiento de datos. Desde el rastreo de redes de microtráfico hasta la identificación de células de crimen organizado, el GOES se sumerge en el entramado delictivo de la región, por ser una unidad descentralizada.
*Operaciones de Precisión y Bajo Perfil*
Cuando la inteligencia arroja resultados concretos, las operaciones del GOES se caracterizan por su precisión quirúrgica. No se trata de despliegues masivos, sino de intervenciones focalizadas, a menudo bajo el manto de la noche o en momentos estratégicos, para minimizar el riesgo y asegurar la captura de los objetivos. «Cada movimiento está planificado meticulosamente», explica otro conocedor de inteligencia policial. «Los funcionarios de esa unidad buscan ser efectivos, sin generar alarmas innecesarias que puedan comprometer la operación o poner en riesgo a sus agentes».
La capacitación de los miembros del GOES es rigurosa, abarcando desde tácticas de combate urbano hasta habilidades de negociación y manejo de crisis. Son profesionales entrenados para operar en entornos complejos y de alto riesgo, siempre con el objetivo de preservar la vida y garantizar el cumplimiento de la ley.

*El Desafío de la Neutralización Preventiva*
La labor del GOES en Lara no está exenta de desafíos. La naturaleza cambiante del crimen organizado, la sofisticación de las bandas delictivas y la necesidad de mantener un perfil bajo son constantes obstáculos. Sin embargo, los resultados, aunque no siempre se hagan públicos, hablan por sí mismos en la estabilidad relativa que se percibe en ciertas áreas de la región.
El verdadero impacto del GOES radica en los eventos que la ciudadanía no llega a conocer: los planes de extorsión frustrados, los cargamentos de droga interceptados antes de su distribución, las bandas de secuestradores desmanteladas en su fase de planificación. Es una guerra silenciosa, librada con inteligencia y estrategia, donde la victoria se celebra en la ausencia del delito.
El Grupo de Operaciones Estratégicas en Lara es un recordatorio de que la seguridad no siempre se manifiesta en uniformes visibles o sirenas ruidosas. A veces, la protección más efectiva proviene de la discreción, la anticipación y un compromiso inquebrantable con la neutralización del peligro antes de que este se convierta en una realidad palpable. Su silencio es su mayor fortaleza, y en él, reside la esperanza de un Lara más seguro.
Equipo de investigación NB