Los mecanismos anti-sanciones propuestos por Irán al Brics van desde una reforma de las instituciones financieras internacionales hasta una revisión del Consejo de Seguridad.
El presidente de Irán, Masud Pezeshkian, planteó este 8 de septiembre, durante la cumbre extraordinaria virtual de los Brics, la creación de un mecanismo común que proteja a los países miembros frente a sanciones unilaterales ilegales y que les permita seguir desarrollando sus economías sin presiones políticas externas.
Leer También: «Sabemos hacerlo mejor» que la DEA «lo dicen los números», señaló la vicepresidenta de la República Delcy Rodríguez
“El Brics podría desarrollar un mecanismo común para apoyar a sus miembros frente a las sanciones unilaterales ilegales y para continuar desarrollando sus economías sin verse sometidos a presiones políticas injustas”, afirmó el mandatario, en clara referencia a las políticas coercitivas de Estados Unidos.
Pezeshkian insistió en que los Brics —bloque que reúne a Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica, Egipto, Irán, Emiratos Árabes Unidos, Etiopía e Indonesia— deben “guiar la transición hacia un orden multipolar, democrático y justo”, en el que se escuchen las voces de los países en desarrollo.
El presidente iraní denunció las agresiones militares sufridas por su país en junio a manos de Israel y EE.UU., la continuidad del conflicto en Gaza, los ataques israelíes contra Líbano y Yemen, y las amenazas estadounidenses contra Venezuela, considerándolos ejemplos del fracaso del orden mundial actual para garantizar la paz, la justicia y la seguridad internacional.
Entre las cinco propuestas concretas que presentó para fortalecer al bloque destacan:
- Reforma integral de las instituciones financieras internacionales,
- Promoción de un multilateralismo inclusivo,
- Creación de un mecanismo de apoyo común contra sanciones unilaterales,
- Revisión del Consejo de Seguridad de la ONU,
- Acceso equitativo a bienes públicos globales, como vacunas y tecnologías médicas.
“Los BRICS, como representante de las economías emergentes y en desarrollo, son el estandarte de la esperanza para construir un orden mundial más justo, igualitario y próspero”, concluyó Pezeshkian.
Actualmente, el grupo de los Brics está ganando protagonismo como alternativa al modelo económico dominado por Occidente. A través de instrumentos como el Nuevo Banco de Desarrollo y los acuerdos en monedas locales, el bloque busca reducir su dependencia del dólar y consolidar una arquitectura financiera más equitativa.
Con más de 3.000 millones de personas representadas y un peso creciente en el comercio internacional, los Brics se consolidan como una fuerza colectiva que busca reequilibrar el poder global. Los países de este bloque, en conjunto representan el 36 por ciento del producto interno bruto mundial y el 45 por ciento de la población global.

Hender «Vivo» González
Con información de Telesur