El Manchester City arrancó el año con victoria ante el Arsenal en un partidazo (1-2)

El conjunto de Pep Guariola refrenda su liderato en la Premier gracias a un gol de penalti de Mahrez y a otro de Rodri en el tiempo de descuento.

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El equipo de Mikel Arteta se quedó sin premio tras completar una gran actuación

El City sigue con la directa puesta hacia el título. Agónica fue la undécima victoria consecutiva del equipo de Pep Guardiola, que refrenda su liderato tras remontar ‘in extremis’ ante un Arsenal gigantesco que terminó por acusar la expulsión de Gabriel en el segundo tiempo. Los ‘gunners’ se quedaron sin premio a su tremendo partido al ver como Rodri conseguía el gol de la victoria ‘citizen’ en el descuento.

El 2022 amaneció con un partidazo y con el City sacando ya 11 puntos a un Chelsea que se enfrenta mañana a otro contendiente, el Liverpool.

Grealish, suplente

Arteta, en su casa al tener que estar en cuarentena por la Covid, dio continuidad al bloque que había conseguido enlazar cuatro triunfos consecutivos, con una línea de mediapuntas formada por Saka, Odegaard y Martinelli que volvió a rendir a las mil maravillas. Mientras, Guardiola decidió dejar otra vez a Jack Grealish en el banquillo pese a tener a Foden de baja.

El partido empezó como se esperaba, con dos equipos con ganas de proponer con el balón y de morder cuando no lo tenía. El City flirteó con ser aquel rodillo que consigue pasar por encima de todos, pero esta vez se topó con un Arsenal sideral. 

Los ‘gunners’ se mostraron férreos en defensa y afilados en ataque. Thomas y Xhaka conseguían robar y regalar rápido el balón a Odegaard, que lanzaba una y otra vez a Martinelli y Saka en las bandas en unas transiciones de vértigo.

Tremendo Arsenal

El Arsenal se disfrazó de City al embotellar en su área a los de Guardiola con varios arreones que se quedaron sin remate. Los ‘citizens’, desbordados por momentos, no encontraron las líneas de pase para zafarse de la presión asfixiante que había planteado Arteta y con la falta de oxígeno llegó el despiste.

Odegaard abrió para Tierney, quien puso progresar al no encontrar oposición del City. El lateral tuvo todo el tiempo del mundo para pensar qué iba a hacer y optó por ponerla en el punto de penalti, donde Saka encontraría la red al rematar de primeras.

El gol del Arsenal hizo justicia a una de las mejores primeras partes que ha hecho nunca el equipo que dirige Mikel Arteta y pareció dejar en el olvido un claro derribo de Ederson sobre Odegaard que tanto el árbitro como el VAR no quisieron ver.

Frustración ‘gunner’

El paso por los vestuarios no alteró el guion del partido y el Arsenal salió al campo manteniendo esa presión alta que tantos problemas había dado al City.

El conjunto de Guardiola seguía igual de incómodo que el primer tiempo, en parte gracias al tremendo despliegue físico de los ‘gunners’.

Se esperaba lo mejor el equipo de Arteta y se encontró con la frustración. Primero al ver como el VAR llamaba al árbitro para revisar una acción que pareció más interpretable que el penalti de Ederson a Odegaard. 

Un penalti y una expulsión

Xhaka peleó un balón con Bernardo Silva y este cayó al notar el contacto. El colegiado lo vio en el monitor y penalizó el agarrón con pena máxima. No iba a fallar Mahrez para igualar un partido donde el City no se se había reconocer en ningún momento.

Después, más frustración para el Arssenal. Laporte casi la lía al quitarle el balón a Edeson, pero Aké sacó el esférico en la misma línea de gol. También por el remate posterior de Martinelli, que pegó en la cara externa del poste para marcharse fuera. 

Para rematarlo, en el saque de puerta Gabriel agarró del cuello a Gabriel Jesus y se ganó la segunda amarilla en apenas unos minutos, dejando a su equipo en inferioridad.

Le costó un mundo al City atacar el muro ‘gunner’, inmune al juego combinativo de los de Guardiola, pero finalmente pudo derribarlo cuando Rodri, con fortuna, remachó desde la pequeña dando el triunfo a los ‘citizens’ en el descuento. 

Mundo Deportivo