¡El dólar baja y los precios suben!

Sorpresivamente —para muchos— bajó. Es el dólar paralelo que rondó la semana pasada en los BsS  2.600, cuando había llegado a picos de casi BsS 4 mil a la venta a principios de año.

Mientras esto sucede, los precios de la mercancía que se rige a partir de esta moneda extranjera siguen escalando vertiginosamente. Son pocos los que reducen los montos de aquello que venden porque el dólar ‘negro’ esté en picada. El sector ropa, calzado y autorepuestos remarca constantemente los precios en bolívares porque lo que adquieren es importado.

“Yo pregunté por unos zapatos la semana pasada y el precio me pareció muy alto. Como me enteré de que el dólar paralelo bajó, yo fui hoy a preguntar y quedé con la boca abierta, estaban más caros. ¿Quién controla esto?, ¿no era porque el dólar estaba caro, pues, y ahora qué dicen?”, narró Juan Gutiérrez, de Mara Norte.

Luis Marquina, comerciante del sector ropa, explicó que él tuvo que comprar los lotes de mercancía con dólares adquiridos en BsS 3.600, “entonces yo no puedo vender ahora esa mercancía que a mí me llegó a un precio más económico porque le perdería como la mitad”.

La anterior es también una realidad latente que es replicada por los comerciantes consultados pertenecientes a todos los ámbitos de la economía formal.

Además, Marquina dijo que está vendiendo pantalones y camisas del año pasado “que todavía no han salido porque la situación está crítica, de broma vendemos una prenda al día”.

Una camisa puede superar fácilmente los 50 mil bolívares, cuando el sueldo mínimo actual se ubica en medio Petro, es decir, BsS 18 mil. Esa misma camisa costaba hace pocos días BsS 30 mil.
No obstante, desde que el dólar bajó, algunos comerciantes han optado por aumentar los precios —incluso en dólares— para no tener pérdidas. Una prenda de vestir que costaba 25 dólares ahora se puede cotizar fácilmente en 28 dólares y a partir de allí, en moneda nacional.

Los comercios de calzados que son importados y otros que no también son sensibles a los cambios que tenga la divisa no oficial. Son similares a los comercios de vestimenta. Es posible ver cómo cambian los habladores o anuncios de precios en las vitrinas.

El mercado de los autorepuestos fluctúa directamente según el dólar paralelo también. “La mercancía que nosotros recibimos de nuestros proveedores ya viene inflada y con base en dólares, es algo que no podemos evitar porque nosotros trabajamos con esos precios”, narró Gabriel Berríos.

Sin embargo, no en todos los escenarios es igual, dependerá mucho del vendedor, pues una serie de 4 bujías tenía hace una semana el valor de 56 mil bolívares soberanos. Ese mismo repuesto “ahora nos vino más económico y lo estamos vendiendo en 48 mil bolívares porque así estamos facturando y si el dólar sube nosotros no subiremos los precios hasta que se venda esa mercancía”, explicó otro comerciante quien prefirió mantenerse en el anonimato.

La comida no se queda atrás en esta carrera del remarcaje. De forma implícita, el comprador puede adquirir un producto con precios que podrían equipararse a 2 o 4 dólares.

“Yo pregunté hoy por un kilo de queso semiduro y el vendedor me dijo que valía 23 mil bolívares, entonces yo calculé y son más de 8 dólares paralelos. Eso casi triplica mi quincena que es de solo 9 mil bolívares”, contó David Morales, de San Jacinto.

 

PANORAMA.