“Cuando vimos el Obelisco nos pusimos a llorar”. Padre de familia que huyó de Colombia con sus hijos

Franyer Quijada es un padre de familia que “huyo” de Colombia, donde vivía con muchos sacrificios para mantener su hogar, y que con la pandemia del coronavirus la vida se le convirtió en una tragedia. “P´a Colombia no regreso más. Voy a dar la pelea aquí en mi país”.

“Cuando vimos el Obelisco nos pusimos a llorar”. Padre de familia que huyó de Colombia con sus hijos

Franyer Quijada es un padre de familia que “huyo” de Colombia, donde vivía con muchos sacrificios para mantener su hogar, y que con la pandemia del coronavirus la vida se le convirtió en una tragedia. “P´a Colombia no regreso más. Voy a dar la pelea aquí en mi país”.

Este barquisimetano decidió emprender toda una larga travesía desde Bucaramanga, para poder llegar a Venezuela pasando por Cúcuta, pernotar dos días en esa población fronteriza, y luego llegar a Barquisimeto donde cumplió la cuarentena, aislado junto a su esposa e hijos, para volver su casa cerca de la avenida Venezuela.

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Familia recibiendo recomendaciones de los médicos

“Pasamos hambre, caminamos mucho y cuando llegamos a San Antonio dormimos dos días en la tierra con mis hijas pequeñas”, narró desde la habitación que ocupó con su grupo familiar en la Villa Deportiva. “Cuando vimos el Obelisco nos pusimos a llorar”, dijo con los ojos llorosos este padre de familia.

Franyer Quijada quien se vino de Colombia junto a su familia

Franyer expresó que el impacto de la noticia de tener que vivir aislado durante 14 días le causo resignación: “Nos alteramos, teníamos siete días de travesía y llegar aquí y tener que estar encerrados nos pegó, pero luego vivimos 14 días espectaculares”, contó.

¿Qué hacían durante los 14 días de aislamiento?

Franyer recomendó a las personas que tienen que cumplir este tipo de aislamiento, dos actividades que les sirvieron a ellos para alimentar el alma mientras pasaban los días. “Hacíamos dinámicas durante el día, teatro, mímicas y en las noches cerrábamos leyendo dos versículos de la Biblia. Aquí vivimos, en comparación a lo que experimentamos en Cúcuta”.

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La familia de Franyer Quijada en la Villa Deportiva

¿Qué pasó con las comidas, muchos se quejaron y el video circuló por las redes?

Franyer explicó lo sucedido: “La comida nunca nos faltó, ese día del video donde salen algunos reclamando, no fue culpa de ellos, simplemente fue un atraso y por eso empezaron a gritar como media hora desde otros apartamentos”.

La esposa de Franyer, madre de dos niñas, habló en tono reflexivo para hacer un llamado a seguir cumpliendo la cuarentena desde sus casas, y agradeció por lo que hacen desde la Gobernación en la Villa Bolivariana.

La Habitación compartida por dos familias en la Villa Bolivariana
Parte de los productos que le entregan a cada familia mientras cumplen el aislamiento

“Cuando vimos el Obelisco nos pusimos a llorar”. Padre de familia que huyó de Colombia con sus hijos