Congreso español rechazó investir a Pedro Sánchez como presidente del gobierno

El Congreso de los Diputados español rechazó este jueves investir como presidente del gobierno al socialista Pedro Sánchez, quien fracasó en su intento de cerrar una coalición de gobierno con la izquierda radical de Podemos.

En la votación, 155 diputados votaron en contra de su investidura, 124 a favor y 67 se abstuvieron, entre ellos los 42 representantes de Podemos. Sánchez tiene hasta el 23 de septiembre para formar gobierno o se convocarán nuevas elecciones en noviembre.

El socialista Pedro Sánchez reconoció este jueves que no tendrá apoyos suficientes en la votación de este jueves para ser investido presidente del gobierno español, tras fracasar el intento de cerrar una coalición con la izquierda radical de Podemos.

“El acuerdo (…) no ha sido posible”, dijo ante los diputados, poco antes de que se vote su investidura. “Lamento mucho constatar que persiste el bloqueo parlamentario”, añadió, aseverando que había propuesto a Podemos entrar en su gobierno con cuatro carteras ministeriales, una de ella una vicepresidencia competente en asuntos sociales.

A partir de ahora, el líder socialista tendrá aún de plazo hasta el 23 de septiembre para formar gobierno, o de lo contrario habrá una repetición electoral el 10 de noviembre.

En su discurso, Sánchez, vencedor de las legislativas de abril sin mayoría absoluta, destacó que las diferencias con Podemos no estuvieron en el programa, sino en el reparto de ministerios.

Según detalló, los socialistas propusieron a Podemos cuatro carteras ministeriales (Sanidad, Vivienda, Economía Social e Igualdad), una de ellas con rango de vicepresidencia del ejecutivo.

En su última oferta, Podemos coincidía en pedir Sanidad, Igualdad y una vicepresidencia, pero también solicitaba Trabajo y Ciencia y Universidades.

“Lo único que pedimos son competencias, no sillones”, le contestó a Sánchez el líder de Podemos, Pablo Iglesias.

El jefe negociador de Podemos, Pablo Echenique, aseveró que el PSOE quería atribuirles “un papel decorativo” y “sin competencias para hacer políticas públicas que mejoren la vida de la gente”.

“Todo ha sido una lucha encarnizada de poder”, fustigó antes de la votación el conservador Pablo Casado, líder del opositor Partido Popular. “¡Han demostrado que son incapaces de pactar para construir!”, les espetó.

“Les separa el ego, que no les cabe en la silla”, lanzó a su vez el presidente del partido liberal Ciudadanos, Albert Rivera, dirigiéndose a Sánchez e Iglesias.

Con sus 123 diputados de un total de 350 en la cámara baja, Sánchez, presidente del gobierno desde junio de 2018, necesitaba a los 42 legisladores de Podemos, indispensables para sumar más síes que noes este jueves.

Las consultas se habían prolongado hasta el último minuto, y tanto el PSOE como Podemos recibieron la presión de otras fuerzas indispensables para el éxito de la investidura, como los independentistas catalanes de ERC y los vascos de EH Bildu, que finalmente se abstuvieron.

“Se van a arrepentir de lo de hoy”, dijo el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, a los líderes de PSOE y Podemos.

“Ustedes tienen cuatro años de vida, cuatro años por cuatro ministerios. Es extraordinario, ¡entren en el gobierno y demuestren durante cuatro años que son mejores!”, le dijo a Iglesias.

 

AFP