La chilena Damaris Silva, técnico en enfermería, dijo que con su instrumento busca “entregar un poquito de amor, entregar un poquito de fe” a los pacientes con covid-19.
En la unidad de cuidados intensivos de un hospital en el sur de la capital chilena, Damaris Silva utiliza el sonido de su violín para aliviar la delicada estancia de personas contagiadas por covid-19.
La técnico en enfermería encontró en el instrumento de cuerdas una manera de aliviar el estrés tanto de los pacientes como del personal médico, agotado por los extensos turnos de trabajo debido a la pandemia.
“Entro a la sala y se produce de inmediato una reacción en los pacientes, lo reciben de buena forma, se alegran, me sonríen, me aplauden desde adentro”, relató.
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Agregó que busca “entregar un poquito de amor, entregar un poquito de fe, un poquito de esperanza con mi violín, que sea tal vez algo más que música”.
Chile suma cerca de 300.000 casos y más de 6.000 fallecidos debido a una rápida propagación del virus, que ha presionado los servicios de salud, principalmente en la región capital.
Pese a que el gobierno ha subrayado “señales positivas” por una disminución en los contagios, las autoridades sanitarias mantienen las medidas de confinamiento para buena parte de la población del país sudamericano.
La Tercera
