El conjunto local golpeó desde el vestuario. A los 7 minutos, Achraf Hakimi envió un centro hacia atrás, Neymar le erró y la pelota le quedó a Idrissa Gueye: marcó el primero con un bombazo al ángulo.
Desde ahí en adelante, todo fue de la visita: dominaron la posesión del balón y crearon las situaciones más peligrosas en lo que quedó del primer tiempo. Entre ellas, una chance increíble: dos tiros en el travesaño, en un cabezazo de Raheem Sterling y luego un remate de Bernardo Silva.
Al equipo de Mauricio Pochettino le costó llegar al área rival, pero tuvo otra oportunidad clara: un remate de Ander Herrera que Ederson salvó con lo justo.
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El City continuó dominando en la segunda mitad. Y casi logró empatarlo con un remate de Kevin De Bruyne, que tapó Gianluigi Donnarumma, una de las grandes figuras del partido.
El PSG no lograba avanzar ni pisar el área de Ederson. El tridente de lujo en su delantera no aparecía. Lionel Messi tuvo un partido discreto, hasta que frotó la lámpara. A los 28 del segundo tiempo, encabezó una contra letal, tiró una pared con Mbappé y la clavó al ángulo: golazo (para su primer tanto con su nueva camiseta) y locura en el Parque de los Príncipes.
El segundo gol mató las aspiraciones del City. Finalmente, el PSG se quedó con el triunfo, el primero en esta edición de la Champions League. Ahora, el equipo de Pochettino es líder del Grupo A, con 4 puntos, al igual que Brujas. El conjunto inglés quedó tercero, con 3 unidades, mientras que Leipzig está en el fondo, sin puntos.
