Los primeros cuatro kilómetros de la carretera El Junquito se encuentran totalmente deteriorados. Entre 10 y 30 huecos de pequeñas y grandes dimensiones se ubican en esta vía, además de cuatro grandes botes de aguas negras, según denuncia Gustavo Silva, dirigente vecinal de esta zona.
Afirmó que desde hace más de 10 años no se ejecutan trabajos de rehabilitación de la carretera. “Se han hecho algunos trabajos puntuales para corregir fallas de borde pero en otros tramos.
En el caso de los primeros kilómetros mientras que no desalojen las invasiones no podrán resolver esos botes de agua que descargan sobre las vía y dañan el pavimento”.
Además alertó que las colas los fines de semana son de hasta dos kilómetros por unos trabajos que se están realizando desde el año pasado en el kilómetro 16, donde hay una falla de borde que solo deja un canal de circulación.
Según los vecinos, este problema es recurrente, tiene tres años, cada vez que llueve se pone peor.
Explicó que en esta zona están construyendo unos pilotes para reforzar pero los trabajos van muy lentos.
Reconoció que la carretera Mamera-El Junquito, que fue inaugurada en el 2012 es una buena vía alterna, solo que es necesario realizar trabajos de mantenimiento y reforzar la seguridad en esta área.
Según denunció, en menos de tres años, luego de la inauguración fueron desmantelados los módulos o paneles fotovoltaicos, instalados para generar electricidad mediante la energía del sol.
Denunció que hasta los postes de la vía se los han llevado delincuentes para venderlos, porque no hay ningún tipo de seguridad.
Peligro nocturno
Transitar por la carretera de El Junquito después de las seis de la tarde es un acto de alto riesgo señalan conductores que han tenido que circular por la vía en las últimas semana.
“Las troneras de los huecos en el pavimento, las fallas de borde, los derrumbes, la falta de iluminación y la densa neblina hacen prácticamente imposible avanzar con seguridad” comenta Nicola Villar quien el pasado sábado regresaba de la Colonia Tovar a Caracas.
Además, reportan que la inseguridad se suma a los riesgos de la vía, pues circulan motorizados que incluso en algunos parajes tratan de parar a los vehículos para que los choferes los asistan en supuestas emergencias. La falta de buena señalización es otra observación que se realiza, muchos conductores no se percatan de la salida de la nueva carrera El Junquito- Mamera pues no es posible distinguir el inicio de la misma de noche.
Por su parte, José Luis García, vecinos del sector Luis Hurtado, señaló que “esto está intransitable, hace seis meses rasparon la vía en los primeros kilómetros y se olvidaron de colocar el asfalto”.
También alertó que por las invasiones que existen en los primeros kilómetros, hay muchos botes de agua que han afectado la vialidad. Otro de los problemas de la vía es falta de iluminación, lo que ha incrementado los hechos de inseguridad en la zona, según denunciaron los residentes del sector.
Los vecinos de está parroquia caraqueña hacen un llamado a las autoridades municipales para que incluyan esta vía en el Plan Caracas.
Otros males
-La falta de transporte es otros de los graves problemas de los vecinos. Según denuncian, ya no existen las líneas de autobuses y solo funcionan las llamadas “perreras” que trabajan hasta las seis de la tarde. En horas de la noche se estacionan en La Yaguara los piratas, en camiones 350, que cobran entre 30 mil a 50 mil bolívares por persona.
-Además la falta de recolección de basura se ha agudizado y también afecta la movilidad porque a la orilla de la vía se forman montañas de desechos que pueden ocupar hasta un canal de circulación.
– Según denuncia Gustavo Silva en El Junquito hay sectores que tiene hasta tres meses sin servicio de agua, como el caso de la urbanización El Peñón. Los ciclos de servicio han aumentado entre 3 y 4 meses por zona.
El Universal
