Cardenales puso en jaque a las Águilas con Néstor Molina como pieza mayor

Molina estuvo en la lomita por 6.0 innings y coqueteó con el no-hitter. No obstante, Olmo Rosario le abrió el séptimo capítulo con un doble que terminó con las esperanzas de la hazaña y le dio un alivio a las tribunas del Luis Aparicio “El Grande” de Maracaibo

El gran movimiento de Cardenales de Lara lo hizo con Néstor Molina. El pitcher fue la pieza que acorraló al rival, que le quitó casi todo el espacio y que tiene al cerebro contrario contra el borde del tablero. En definitiva: los crepusculares, con el derecho como torre, pusieron en jaque a Águilas del Zulia en la semifinal de la LVBP, reseñó la prensa de la LVBP.

Molina estuvo en la lomita por 6.0 innings y coqueteó con el no-hitter. No obstante, Olmo Rosario le abrió el séptimo capítulo con un doble que terminó con las esperanzas de la hazaña y le dio un alivio a las tribunas del Luis Aparicio “El Grande” de Maracaibo. De todas maneras, el trabajo del serpentinero sentó las bases de la victoria 8-2 de los pájaros rojos, que ponen la serie 3-1 a favor y están a un laurel de su cuarta final consecutiva.

El triunfo se le selló al perfil de Molina, que ponchó a tres adversarios y dio dos bases por bolas, además de aceptar una carrera y dos imparable. Pero en el plato los hombres que le dieron las anotaciones a los crepusculares fueron Yordanys Linares e Ildemario Vargas, con tres y dos impulsadas, respectivamente. También alzó la ofensiva Osman Marval con su segundo cuadrangular de la serie. Perdió César Jiménez después de 5.0 innings y dos carreras toleradas, una de ellas limpia.

Cardenales hizo dos rayitas en el segundo acto por sencillo de Vargas que remolcó a Carlos Rivero y Jecksson Flores. Marval dio su vuelacerca solitario en la parte alta del séptimo episodio, y en la entrada baja, Herlis Rodríguez le dio la primera anotación a Águilas con elevado de sacrificio.

El triunfo larense se concretó en el octavo inning, con un rally de cinco rayitas, cortesía de imparables de Flores y Vargas y cuadrangular de Linares con dos en base. Olmo Rosario empujó la segunda y última carrera de Zulia con sencillo.

Además del control de Molina y los relevos efectivos de Gumercindo González, Vicente Campos y Jesús Sánchez, los rapaces tuvieron una mala noche defensiva: cometieron tres pecados, dos de ellos de Rosario quien, irónicamente, fue el mejor con el bate para el equipo.

Este viernes se jugará el quinto encuentro de la serie, y el último de las semifinales en el Estadio Luis Aparicio “El Grande” de Maracaibo.

V. Final