Todo el personal que labora en este centro asistencial del municipio Palavecino del estado Lara están alarmados por las pésimas condiciones en que se encuentran para poder atender los pacientes, mientras denuncian que el camillero del ambulatorio no ha sido remitido al centro centinela de Sarare, a pesar que dio positivo de la prueba PCR.
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Este sábado en horas de la mañana médicos, enfermeras y trabajadores del Ambulatorio Urbano III “Don Felipe Ponte” de Cabudare, decidieron salir a la calle a protestar debido a las graves deficiencias y carencias que tienen de insumos, materiales y equipos de bioseguridad, necesarios para enfrentar la pandemia de coronavirus, y atender en las mejores condiciones a los enfermos que diariamente acuden por la emergencia.
“No puede ser que este ambulatorio, que tiene un área de influencia de más de 200 mil habitantes, esté en estas lamentables condiciones. Hacemos un llamado al director de Salud, Dr. Javier Cabrera para que visite el centro de salud y compruebe la grave situación y como estamos laborando”, denunció el representante de los trabajadores a través de un video.
Según la información aportada por el personal médico del ambulatorio, este viernes 7 de agosto el camillero del ambulatorio de Cabudare Alexander Suarez, de 50 años de edad, dio positivo a la prueba del covid-19, y todavía no ha sido remitido al centro centinela de Sarare, poniendo en riesgo tanto al personal que trabaja en la institución pública como a los pacientes que allí acuden para ser atendidos.
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Según los propios trabajadores que permanecían a las afueras del ambulatorio, están cansados de solicitar apoyo a la alcaldesa de Palavecino, Mirna Vies, pero nada que los atiende, ni siquiera se toma la molestia de ir a comprobar la grave situación en que se encuentra el principal centro de salud del municipio.
