Real Madrid recibe este miércoles al Barcelona en la vuelta de semifinales de la Copa del Rey, el primer asalto entre los dos grandes esta semana antes del encuentro de Liga del sábado, que puede aclarar el campeonato español.
Tras el 1-1 de la ida en el Camp Nou a principios de mes, todas las posibilidades están abiertas, aunque el equipo blanco juega con la pequeña ventaja del gol logrado a domicilio, que le daría el pase en caso de un empate sin goles en el Santiago Bernabéu.
A nueve puntos de líder liguero azulgrana, los blancos llegan a este partido con ganas de dar en Copa el golpe que tiene complicado en Liga.
Vinicius Juniur, extremo brasileño vuelve a perfilarse como favorito frente al galés Gareth Bale, envuelto en la polémica tras no festejar con sus compañeros el gol de la victoria que marcó el fin de semana pasado Levante y del que Solari no quiso adelantar si podría formar parte del once.
Enfrente estará un Barsa que llega al Bernabéu con el astro argentino, Lionel Messi en estado de gracia tras rescatar a su equipo el pasado sábado frente al Sevilla con un triplete y una asistencia 4-2 en el torneo domestico.
Los números del capitán azulgrana, con 33 goles en 32 encuentros oficiales, son estratosféricos, pero Vinicius advierte: “es un jugador asombroso, hace cosas que pocos jugadores pueden hacer, pero no nos asusta”.
Los culés buscan su quinta Copa seguida, un récord inédito, y seguir aspirando al triplete.
